TOROS
Joselito Adame: una competencia muy desigual
El arranque simultáneo de la temporada 2007-2008 en la Monumental Plaza México y de la campaña de Joselito Adame en cosos de nuestro país abre la posibilidad de sugerir una apuesta, basada en la siguiente opción: ¿los diestros que actúen a lo largo de este serial de invierno (desde la semana pasada y hasta febrero o marzo) en los festejos del embudo de Mixcoac, según usted, cortarán en su conjunto más o menos apéndices que el niño prodigio michoacano durante el mismo lapso y de forma individual?
El resultado de esta desigual competencia permitirá establecer si el empresario Víctor Curro Leal estaba en lo correcto al negarse a contratarlo, bajo el astuto argumento de que “todavía no es figura”, o si por el contrario, Joselito Adame tenía los pies bien plantados sobre la tierra cuando pidió lo que pidió sabiendo que eso es lo que vale.
La carrera de hecho ya empezó y, sin tomar en cuenta los resultados de ayer, el nuevo fenómeno de los ruedos va adelante con una clara ventaja desde el principio: toreó la corrida de las calaveras en Morelia y salió en hombros con dos orejas y un rabo en la espuerta; después fue a la yucateca Plaza Avilés de Motul, a 40 kilómetros de Mérida, y se llevó otra oreja.
Los hombres de Curro Leal por su parte, en la corrida inaugural de la semana pasada, produjeron una cosecha de tres orejas (dos para José Tomás y otra para Rafael Ortega). Ahora habrá que ver los resultados de ayer y sumar para actualizar las comparaciones. ¿Que la México es una plaza muy seria y por lo tanto un rabo en Morelia no se equipara a nada? No nos engañemos: hace años, desde que Rafael Herrerías la hundió en la mediocridad, la de Mixcoac tiene la importancia de una plaza de trancas.
Si a las pruebas hubiera que remitirse, pues allí están, por ejemplo, los toros que ayer fueron corridos en el Nuevo Progreso de Guadalajara, donde Joselito estaba anunciado para alternar con César Rincón e Ignacio Garibay para la toma de alternativa de Riverita, y que estaban más hechos, con indiscutible cuajo y trapío, avergonzando al ganadero que para la función de ayer envió a Insurgentes un encierro tan modesto de cuerna y presencia como el de Barralva de hace ocho días.
Vamos a ver, pues, qué sucede, rogando que esta competencia entre todos los hombres de Curro Leal contra el poderío de Joselito Adame no provoque una barata de orejas y rabos en la México, donde por otra parte en el curso de la semana que terminó ayer volvió la calma al sindicato de matadores de toros y novillos, tras el anuncio oficial de la bancada del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), en el sentido de que no aprobará ningún cambio a la reglamentación taurina vigente, para impedir que los empresarios locales puedan contratar a dos diestros extranjeros y solamente a uno nacional. Esa mala idea, por fortuna, quedó atrás, de modo que volviendo al toro, sólo resta decir, ¡hagan sus apuestas, señoras y señores!