Los responsables son los mismos que pretenden privatizar la energía eléctrica, sostiene
“Demostraré que la tragedia pudo evitarse”, advierte López Obrador
Reitera que la inundación en Tabasco se debió al desfogue “irresponsable” de la presa Peñitas
En sólo tres días, la CFE desalojó 2 millones de litros por segundo de ese cuerpo de agua
La paraestatal subutiliza las hidroeléctricas de la región para favorecer a trasnacionales, indica
Ampliar la imagen El embajador de Estados Unidos en México (derecha), Antonio Garza, y su esposa, María Asunción Aramburuzabala, además del empresario Roberto González Barrera (centro), acompañaron ayer al presidente Felipe Calderón durante una gira por zonas afectadas de Tabasco y Chiapas Foto: Claudia Herrera
Atotonilco el Grande, Hgo., 9 de noviembre. Andrés Manuel López Obrador dijo que demostrará que la tragedia en Tabasco pudo evitarse y probará que los responsables son los mismos que quieren privatizar la energía eléctrica, sin importar la seguridad de los mexicanos ni la soberanía.
Agradeció la solidaridad de los mexicanos con los tabasqueños e informó que desde el “gobierno legítimo” que encabeza se continuará con el acopio y envío de víveres y artículos de primera necesidad a esa entidad.
En un recorrido por siete municipios de la sierra de Hidalgo, López Obrador insistió en que no fue la lluvia la que inundó Villahermosa y otras zonas de Tabasco, sino los 2 millones de litros de agua por segundo que durante tres días se desfogaron de la presa Peñitas.
Ante habitantes de Tianguistengo, explicó que gran parte de Tabasco quedó bajo el agua, pero no por las lluvias que durante dos días azotaron la entidad, sino por el mal manejo de la hidroeléctrica de Peñitas, que es administrada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Siguió con el tema en Zacualtipan, donde informó a campesinos –muchos de ellos indígenas– que prepara una demanda penal en contra de la paraestatal, la Secretaría de Energía y otras dependencias por su responsabilidad en esta “tragedia mayor”.
Explicó que la causa del percance es la política del “gobierno espurio” de Felipe Calderón de disminuir hasta en 50 por ciento la producción de energía en las cuatro hidroeléctricas de la región para beneficiar a empresas extranjeras, que producen ya 30 por ciento del fluido que se consume en el país.
Peñitas no trabaja a toda su capacidad porque la CFE no quiere que compita con las trasnacionales, señaló. Por eso fue acumulando agua; con las lluvias de dos días llegó a su máximo nivel y fue necesario abrir las compuertas para liberar líquido.
“Abrieron las compuertas y soltaron 2 millones de litros de agua por segundo durante tres días; ese caudal fue el que arrasó parte de Tabasco”, precisó
“Negocio de las trasnacionales”
En una reunión con habitantes de Atotonilco el Grande, reiteró que en los próximos días quedará lista la demanda contra la CFE, en la que demostrará la “irresponsabilidad” en el manejo de las presas del río Grijalva, en especial la de Peñitas.
Señaló que Calderón mantiene la estrategia de Carlos Salinas de Gortari de privatizar por completo el sector eléctrico. “Tienen a las hidroeléctricas a la mitad de su capacidad y quieren pararlas por completo para entregar el negocio a las trasnacionales.”
López Obrador llevó a cabo mítines en Huesca, Acatlán y Tulancingo, donde agradeció la solidaridad de los mexicanos para con sus paisanos.
Entre aplausos, precisó que el “gobierno legítimo” envió a Tabasco seis tráileres con artículos de primera necesidad y continuará con el acopio de víveres, pues la situación del estado no se resolverá en el corto plazo.
“¡Tabasco, Tabasco!”, coreaba la gente, y el tabasqueño adquirió un compromiso: “Voy a demostrar que esta tragedia pudo evitarse; voy a demostrar que hubo responsables”.
Un día antes, López Obrador concluyó el recorrido por 212 municipios de Veracruz, en una jornada que finalizó cerca de las 10 de la noche.
Ya en Hidalgo, denunció el estado lamentable de las carreteras de la Huasteca veracruzana, donde encontró deslaves, caminos de terracería estrechos y ríos sin entubar. En Huasca, durante un mitin en la plaza principal, escuchó quejas por el mal estado de la infraestructura y la falta de apoyo al campo.
Llamó a sus simpatizantes a seguir fortaleciendo la resistencia, que es la única que puede hacer frente a la política entreguista de Calderón. En Tulancingo informó que 1.7 millones de personas son ya representantes del “gobierno legítimo”.