Ofrecerá concierto el 15 de noviembre en el Lunario
Divas por excelencia es un disco que une géneros: Elizabeth Meza
“Cantantes como María Elena (Malena) Durán y Regina Orozco, mis amigas, son talentosas y están empujando fuerte por traer un poco más de cultura; me siento muy halagada de estar con ellas en el disco Divas por excelencia. Volumen 2”, expresó en entrevista Elizabeth Meza, quien ofrecerá el concierto titulado Una noche de jazz, el próximo 15 de noviembre, en el Lunario del Auditorio Nacional.
El disco es el segundo de la serie (de la compañía Straigth Songs), a la que han sido invitadas algunas de las mejores intérpretes mexicanas. En el primer volumen, editado el año pasado y que fue disco de oro por sus altas ventas, intervinieron Susana Harp, Magos Herrera e Iraida Noriega, que entre otras sentimentales dejan oír Ojos negros, La llorona, Nicolás y Sol de Lisboa.
Ahora, la soprano, vedette y actriz Orozco canta Virgen de media noche, Qué bonito amor, Bésame mucho y Miu miu; Meza: Nocturnal, Bonita, Tenderly y Moondance. Durán: Gea, Isela, Pavorreal y Tu ausencia. El concepto es de Abdul Burgos, director artístico del sello.
En la entrevista con La Jornada, Elizabeth Meza, quien ha sido solista de la orquesta de la Universidad Veracruzana y se ha especializado como jazzista, en los años 90 participó en arreglos y colaboró en giras de Deep Purple, Emmanuel, Alejandra Guzmán y Paulina Rubio, entre muchos otros, dijo que “estas compilaciones unen géneros diversos y tienen en común a la cultura”.
Jazz latino, mezclas y fusiones
Tiene cuatro discos grabados de jazz y en el más reciente, titulado Obsesión, interpreta boleros de la época de oro en México. Formó parte del jurado del programa Latin American Idol para el canal Sony. “La línea que trabajo es una búsqueda. Soy compositora y estoy descubriendo cosas, como el jazz latino. En mi caso estoy haciendo mezclas, fusiones, el jazz con sus fusiones, boleros con ritmos latinos. Yo elegí los temas del disco y están muy ad-hoc con lo que estoy haciendo: un bolero, un swing y una de las baladas más grandes del jazz: Tenderly.”
Nació en Chihuahua y se crió en Coatzacoalcos, Veracruz. “Ya no puedo pensar en otra cosa que no sea el mar y el sur. Mis recuerdos se remontan a caminatas en el malecón. Nunca pensé en ser cantante, pero se fue dando, poco a poco”, añadió. En el Distrito Federal conoció a Chilo Morán; en Cancún siguió con el jazz; luego se fue a Inglaterra, “para ver mundo y madurar. Yo hice lo que se me dio la gana. Aprendí idiomas y no soy tonta”.
“Algo raro y muy padre es que he trabajado una doble tesitura: soy mezzo y soprano; no llego a contralto, pero tengo casi dos octavas y media de registro, pero lo que importa es saber usar lo que tengas, y el gusto. En Inglaterra estuve en una banda de negros, para funk, reggae y otros ritmos. Me pagan por cantar desde 1978”. Dice que es de la vieja escuela, la que aprende “haciéndose camino al andar”.
Ha hecho coros para Ricardo Arjona, Edith Márquez, Willie Colón, Fania All Stars… “Ahora me veo madura, sé que he crecido y que canto mejor. Creo que he hecho tantas cosas que no me he enfocado a hacer lo mío, la verdad. Pero lo estoy haciendo y lo que necesito es proyección.
“A mí no me interesa ni la edad, ni el tiempo; pienso que las cosas que valen la pena llegan cuando deben llegar. Tengo experiencia y eso se nota en el escenario. Ya no tengo nada que esconder de mí misma. Requiero que se me abran escenarios, lo que sucede cuando te oyen.
“Tal vez nos presentemos juntas, Regina, Malena y yo. Ese es un proyecto. Me gustaría cantar cosas de ellas, y ellas quizá de mí.” Sigue trabajando con Willie Colón, de quien aseguró que nunca se va a retirar, a pesar de los proyectos del salsero de dedicarse a la política.
El disco Divas… cuesta cien pesos y el concierto en el Lunario comenzará a las 22 horas; boletos en Ticketmaster 5325-9000 y en las taquillas; precio: 350 pesos.