Avizora EU escasez en invierno ante “robusta demanda” y menor producción de la OPEP
La mezcla mexicana de crudo subió al récord de 82.15 dólares
El alza de precios ha compensado la constante caída de la producción petrolera a causa del agotamiento de los campos
La cifra de ayer es 93% superior a la usada en el presupuesto 2007
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Precios por galón de gasolina en una estación de servicio de Shell, en el centro de San Francisco. Los precios del crudo llegaron ayer a nuevos máximos al cerrar en 97 dólares el barril
Foto: Ap
El precio internacional del petróleo repuntó este martes a nuevos máximos, en una jornada alcista azuzada por indicios de un crecimiento en la demanda de los principales consumidores. La mezcla mexicana de crudo de exportación repuntó 82.15 dólares por barril, nivel que representó un nuevo récord, un aumento de 2.08 dólares respecto a la víspera.
La nueva jornada alcista confirmó el pronóstico de analistas del mercado energético sobre la inminencia de que el crudo llegue pronto a 100 dólares por barril. El marcador de referencia estadunidense, West Texas Intermediate, cuya evolución determina en gran parte la evolución de la mezcla mexicana, cerró ayer en 97 dólares por barril, tres dólares más que el día anterior.
El precio internacional avanzó después que el gobierno de Estados Unidos, el principal consumidor del hidrocarburo en el mundo, estimó ayer que “una demanda robusta” y la “estrechez” en la producción de las naciones agrupadas en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se combinarían para provocar escasez de combustible durante el próximo invierno, reportó Reuters.
La escalada de precios de petróleo, que ha provocado temores entre analistas internacionales sobre el efecto que tendrá en el crecimiento y los precios de la economía mundial, ha sido al menos en lo inmediato beneficiosa para México, donde más de un tercio de los ingresos fiscales tiene su origen en la exportación de crudo.
Este martes, cuando la mezcla mexicana de petróleo de exportación llegó a 82.15 dólares por barril, la cotización más que duplicó el punto más bajo de los últimos 20 meses, registrado a finales de enero pasado, cuando se situó en 40.5 dólares el barril. El alza de precios ha logrado compensar la sostenida caída en la producción de petróleo, causada por el paulatino agotamiento de los campos, en especial de la Sonda de Campeche, región de donde se extrae 80 por ciento del petróleo mexicano.
Entre enero y septiembre de este año, los ingresos petroleros obtenidos por el gobierno federal fueron de 607 mil 780.8 millones de pesos, 4.6 por ciento menos que en el mismo periodo de 2006, de acuerdo con la información más actualizada de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La semana pasada, la SCHCP explicó que la caída en los ingresos petroleros respecto al año anterior tenía su explicación “principalmente por la disminución de la plataforma de producción y exportación de petróleo, así como por la disminución en el precio de venta interno del gas natural, combustóleo y otros petroquímicos”.
Para la elaboración del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2007, el gobierno federal y la Cámara de Diputados fijaron un precio del barril de petróleo de 42.5 dólares por barril, con una plataforma de exportación de un millón 628 mil barriles diarios.
El precio alcanzado por la mezcla mexicana este martes es superior en 93 por ciento al utilizado como referencia para el presupuesto federal de 2007.
En el proceso de elaboración del presupuesto para 2008, el precio de referencia de la mezcla de crudo mexicano fue fijado en 46.6 dólares por barril, aunque ese nivel está todavía sujeto a un proceso de ajuste en la Cámara de Diputados.
Este martes, en un seminario organizado por la Universidad Iberoamericana, Mariano Ruiz-Funes Macedo, coordinador de asesores de la dirección general de Petróleos Mexicanos, se refirió a las acciones que espera poner en marcha la paraestatal para compensar la merma en la producción de crudo y aumentar la oferta de energéticos.
Mencionó que Pemex está considerando la posibilidad de construir refinerías fuera del país para compensar la oferta de productos derivados del petróleo con la mayor demanda en el mercado interno. “Es terrible decirlo, pero sea en territorio nacional o fuera, México requiere de la construcción de refinerías”, aseguró.