El próximo mes definirán reglas del proceso interno
Aplazan consejo por falta de acuerdos sobre comité electoral
El consejo nacional del PRD decretó un receso para continuar el 16 y 17 de noviembre próximos la definición de reglas y mecanismos para la elección de su próxima dirigencia nacional, después de 48 horas de debate infructuoso sobre este punto.
Los alrededor de 350 consejeros aprobaron en lo general los reglamentos de las comisiones de Vigilancia, Disciplina y Garantías –con una modificación en esta última, a propuesta de Saúl Escobar, para que los responsables duren en el cargo cuatro años con posibilidad de relegirse por dos más–, y la de Elecciones, pero sin entrar al debate de fondo para la conformación del comité técnico electoral.
Determinaron que se continuara con la discusión una semana después de las elecciones en Michoacán (programada para el segundo domingo del mes entrante), y dos días antes de la asamblea en el Zócalo capitalino de la Convención Nacional Democrática, del 18 de noviembre, a la que, se resolvió, se evitará trasladar los conflictos internos del partido.
El desacuerdo sobre el mecanismo del proceso interno del próximo año se mantuvo a pesar de los intentos por consensuar acuerdos entre los bloques que respaldan las candidaturas de Alejandro Encinas y Jesús Ortega, los principales contendientes para presidir el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) en marzo de 2008. El punto central de la disputa fue la integración del órgano encargado de conducir ese proceso.
Ante ello, el presidente del PRD, Leonel Cota Montaño, anunció a los consejeros que a partir de hoy buscará llegar a acuerdos con los cuatro aspirantes a sucederlo en el cargo –además de los citados, Camilo Valenzuela y el senador Ricardo Monreal– en torno a las tres personas que –se aprobó– podrían integrar el comité técnico electoral, a las tres para Garantías y para Fiscalización, respectivamente, a menos que se resuelva desaparecer este último órgano para que sus funciones las retome el CEN. Y para la de Afiliados, un representante por cada corriente interna registrada, más un comisionado.
Los consejeros debatieron ayer en torno a la aprobación de reglamentos básicos para la elección –que deberán estar listos el 23 de noviembre, junto con el grueso de los 16 que derivan de las modificaciones estatutarias de agosto pasado–, aunque los de Foro Nuevo Sol –encabezados por Eloi Vázquez–, Izquierda Democrática Nacional y el grupo de Red de Izquierda Revolucionaria, que encabezan José Antonio Rueda y Pablo Franco, evaluaban, en sintonía con Encinas, que la mejor alternativa política era dejar los órganos como están, para que expertos del partido en la materia conduzcan el proceso.
Mientras, los de Nueva Izquierda insistieron en cambiarlos, para que las elecciones estuvieran en manos de personalidades, planteamiento que rechazan los grupos que apoyan a Encinas, para evitar algún vacío en la organización de los comicios para elegir presidentes, consejos y congresos a escala nacional, estatal y municipal.
Carlos Navarrete, coordinador en el Senado, explicó que uno de los obstáculos para sacar adelante las comisiones electorales fue el candado establecido en las reformas estatutarias, donde se definió que este tipo de decisiones debían contar con 80 por ciento de los votos de los consejeros. Y anoche, las diferencias entre corrientes del partido hacían imposible superar ese límite.
Así, cuando se esperaba que este domingo el consejo nacional comenzara a perfilar las bases sobre las cuales se conducirá el proceso electoral de marzo próximo, los perredistas continuaron enfrascados en la discusión en torno a la figura del vocero, Gerardo Fernández Noroña, y sus excesos declarativos.
Vanos resultaron los intentos por alcanzar acuerdos por la mañana entre integrantes del CEN y líderes de grupos internos, para allanar el camino en el consejo. Los disensos fueron más evidentes pasado el mediodía de ayer, cuando el presidente del partido, Leonel Cota Montaño, decidió llevar la discusión sobre el vocero al pleno.
Pasadas las 15 horas se decretó un receso para comer y los trabajos se reiniciaron casi tres horas después. Entonces comenzó en forma la aprobación en general de los reglamentos.