La política oficial estimula el desarrollo social a cambio de coaccionar el voto, dice
El presupuesto 2008 para la Sedeso, insuficiente, afirma experto de la UAM
El presupuesto de 37 mil millones de pesos que la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) proyectó para 2008, “no es suficiente ni óptimo”, debido a que el gobierno federal mantiene “invariable” la política de estimular ese sector el próximo año a cambio de “coaccionar” el voto, refieren especialistas en temas de pobreza y desarrollo.
A casi un año de asumir el cargo, la secretaria Beatriz Zavala mantiene invariable el perfil de la política social que heredó, y “no ha acabado de ubicar” que las prioridades del gasto de inversión deben aplicarse en programas estratégicos de impacto social y no en aquellos que ha venido operando –como el de Atención a Adultos mayores de 70, Guarderías y estancias infantiles y Espacios públicos–, que sólo “son lucidores”, afirmó el experto Sergio Martínez.
El académico de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) consideró que si bien en Oportunidades hay continuidad en las políticas para otorgar un mínimo de bienestar a un sector de la población, la Sedeso carece de una visión de “cómo hacer que el gasto en compensación social se vuelva inversión productiva, por acciones colectivas, comunitarias o educativas, en el desarrollo del capital humano”.
Los programas eluden las actividades productivas
Desde la pasada administración, refirió, en la Sedeso “no han encontrado la forma de ligar sus programas a las actividades productivas”, ni se prevé que ocurra, agregó, debido a que no han variado el perfil operativo que heredaron y “no se ven acciones de innovación que nos dejen ver un mejor uso del presupuesto”.
Martínez Romo dijo que los programas de Adultos mayores de 70 y el de Estancias infantiles “no se asocian claramente a actividades productivas”, sólo a proyectos con miras a aprovechar, de manera selectiva, los procesos electorales.
“No se les ven funciones estratégicas, ya que tienen un cariz político. Estamos en un sistema político más eficiente de lo que se creyó y más difícil de desmantelar para hacer algo nuevo”, afirmó.
Al respecto, un análisis del centro de estudios Fundar destaca que en la década reciente la estrategia federal de generación de opciones de ingresos (diseñado para que las familias más pobres generen sus propios recursos y dejen de depender de los programas asistenciales) del esquema de superación de la pobreza “se ha estancado en términos presupuestarios”.
Además de que la Sedeso ha “abandonado” esta vertiente, ya que para el próximo año propone una disminución de 58.8 por ciento en este rubro, que es indicativo de que el apoyo “es y será menor, por lo que los recursos actuales están condenados a desperdiciarse una vez más”.
En un análisis sobre el gasto de la Sedeso, señala que para superar la pobreza en el país es indispensable que el gobierno cuente con una estrategia clara en la materia, de lo contrario, advierte, repetirá las experiencias de los años recientes en los que han aparecido y desaparecido programas sociales, “como ocurre en el proyecto de Presupuesto de Egresos 2008” con el esquema Contigo, que a pesar de ser reconocido mundialmente “ha sido ignorado por el actual gobierno”, ya que no aparece en el Plan Nacional de Desarrollo, en la exposición de motivos del propio presupuesto 2008 ni en los informes de labores de la Sedeso ni de Presidencia.
Resalta que aunque habrá un incremento de 3.4 por ciento en términos reales al presupuesto de la Sedeso para 2008, los recursos destinados sólo a los programas sujetos a reglas de operación presentan un decremento de 3.37 por ciento en términos reales.
Alerta, además, que “existen grandes variaciones que benefician a los programas recién creados en esta administración”, como son el de Guarderías, que recibe un incremento de 39.2 por ciento al pasar de mil millones en 2007 a mil 441 para 2008; el de Rescate de espacios públicos, que tendrá un aumento de 17.6 por ciento con respecto a los mil 217 millones que opera; el de Desarrollo local microrregiones, que crecerá 107.9, al crecer su partida de 940 a dos mil 19 millones de pesos.
Mención especial merece el programa de abasto de leche a cargo de Liconsa, que además de ser cuestionado por la Auditoría Superior de la Federación, recibió un incremento de 134.6 por ciento en términos reales, después “de que el año pasado sufriera un recorte que disminuyó la mitad de los recursos que tuvo disponibles para 2006”.