Firma de renuncias anticipadas y prohibición de sindicatos, entre las anomalías
Viola industria electrónica leyes laborales del país
Amenazas de despido por intentar sindicalizarse; firma de renuncias anticipadas; contratos temporales, incluso de 15 días; accidentes de trabajo constantes; exposición a sustancias tóxicas o peligrosas; pruebas de embarazo a las obreras y otras violaciones laborales padecen empleados de la industria electrónica de México.
Revela lo anterior el informe Trasnacionales de la electrónica y derechos laborales en México, el cual plantea que en este sector prácticamente no se respeta la Ley Federal del Trabajo, ya que se registran prácticas de outsourcing (contratación indirecta), discriminación, inestabilidad laboral, constantes accidentes y enfermedades laborales, falta de libertad de asociación y hasta prácticas de acoso sexual.
El documento detalla que la industria electrónica es uno de los sectores más grandes de México, compuesto por más de mil 300 empresas y cerca de 400 mil trabajadores. Sin embargo, no existe una industria electrónica mexicana, ya que el sector se compone casi exclusivamente de empresas de origen extranjero.
No obstante, las prácticas laborales en el sector no son claras, ya que hay graves violaciones a los derechos de los trabajadores, y la mayor prueba es que 90 por ciento de las firmas tienen contratos de protección con sindicatos blancos para evitar la defensa de los empleados.
En la investigación se sacan a la luz casos que involucran a empresas como Hewlett Packard, Intel, Dell, Solectron, Sun Microsystems, Hitachi, Lenovo, Flextronics y Sanmina SCI, entre otras, en lo que se narran hechos sucedidos entre junio de 2006 y agosto de 2007, periodo en el que hubo un aumento en el uso del outsourcing en esta rama, es decir, la contratación de personal mediante terceras compañías para evadir responsabilidades laborales.
El reporte hecho por el Centro de Análisis y Reflexión Laboral también detalla que 35 por ciento de las 2 mil quejas de violaciones en el sector se relacionan con despido de trabajadores que defienden sus derechos y buscan la sindicalización. Pero esto va más allá, ya que también se corre a quienes han pertenecido a un sindicato e incluso a quienes son estudiantes de leyes o parientes de algún abogado, a las mujeres embarazadas e incluso a personas que portan tatuajes.
Además, en la industria electrónica se utilizan extensamente los contratos temporales de trabajo, los cuales son desde 15 días hasta seis meses; la firma de renuncias adelantadas y la negación del goce de vacaciones conforme a la ley. Sin embargo, entre los hechos más graves se encuentra el elevado número de casos de accidentes y enfermedades documentadas que se generan por las altas exigencias de producción y la prevalencia de condiciones de inseguridad, así como por la exposición permanente de los empleados a sustancias tóxicas y peligrosas, como plomo, alcohol isopropílico, selladores, acetonas, cadmio, plata, estaño y ácidos.
Asimismo, según el documento se dan prácticas de “acoso sexual dentro de las fábricas de la industria electrónica, como una forma de presión de los supervisores hacia las trabajadoras de menor nivel”.
Concluye que los casos de violaciones laborales no son aislados, sino que responden a problemas estructurales inherentes a una industria que se ha establecido en varios países del tercer mundo, como China, Malasia, Filipinas, India, Brasil y México, “buscando comprar mano de obra barata, joven y controlada”.