Considera compatible la conservación de esos ecosistemas con el desarrollo turístico
Se agravará desaparición de manglares con el cambio climático: especialista
Ampliar la imagen “Se pueden hacer hoteles protegiendo el manglar, lo que no se puede hacer es rellenarlo para poner un campo de golf”, afirmó Exequiel Ezcurra, especialista en la materia. La imagen fue captada en Yucatán Foto: Notimex /Francisco Martín
La tasa actual de desaparición de manglares es una tragedia para el país, y la situación puede ser peor, porque este problema se profundizará con el cambio climático, advirtieron expertos, y descartaron que con la prohibición legal de explotar esos ecosistemas se detenga la construcción de desarrollos turísticos.
Exequiel Ezcurra, especialista en la materia, afirmó: “siempre he estado preocupado por la tala de manglares; es un problema severo”, y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) debe definir el método que utilizó la Comisión Nacional para el Uso y Conocimiento de la Biodiversidad (Conabio) en el reciente inventario, ya que pudo haber sido una metodología distinta a la que aplicó hace dos años el Instituto Nacional de Ecología (INE).
En entrevista telefónica, el ahora director del Centro de Investigación de Biodiversidad del Museo de Historia Natural de San Diego sostuvo que sí se redujeron 230 mil hectáreas de manglares en sólo dos años, al pasar la cifra de 880 mil hectáreas en el estudio del INE a 650 mil, de acuerdo con el inventario de la Conabio
“La tragedia es aún mayor de lo que las personas pesimistas como yo pensamos”, abundó. El manglar no puede replantarse ni reforestarse, por lo que si se tala, el daño es irreparable, detalló.
Ante el argumento que han esgrimido autoridades, como el titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Ignacio Loyola, de que la prohibición total en la explotación de manglares está provocando que se les deje morir, Ezcurra respondió: “no hay datos de que esto ocurra; es un argumento común. No veo cómo se puede matar a cientos o miles de manglares, no se ha visto que ocurra en el campo, por la población. Ocurre en casos como la tala para la explotación de petróleo; por construcción hotelera en Quintana Roo o Baja California; por tala para hacer pozas de acuacultura en la costa de Sonora y Sinaloa, y mortalidad de manglar por contaminación de petróleo, como sucedió en la década de los 80 en el sureste; todos estos aspectos sumados son importantes”.
Por su parte, Juan Carlos Cantú, de la organización Defenders of Wildlife, afirmó que el problema con los datos que se acaban de divulgar es que hay menos manglares de lo que se estimaba hace dos años, y el INE hizo una estimación de pérdida de esos ecosistemas de 1.1 por ciento al año, con lo cual determinó que desaparecería 50 por ciento en 25 años, pero esto fue sin considerar el cambio climático, por lo que la desaparición podría ser aún mayor.
Dijo que ahora se sabe que el calentamiento global provocará un incremento en el nivel del mar y la inundación de las zonas costeras bajas del país, y “si los manglares se inundan completamente, desaparecerán”.
Añadió que las raíces del manglar están fuera del agua para “respirar”, y si son inundadas, morirá.
Aseveró que hay quejas de desarrolladores turísticos de que con las limitaciones que establece la Ley General de Vida Silvestre para explotar este ecosistema no pueden continuar con sus proyectos, pero en lo que va del año se han autorizado tres planes en zonas de mangle. En otros años se autorizaron en promedio dos proyectos.
“Se pueden hacer hoteles protegiendo el manglar, lo que no se puede hacer es rellenarlo para poner un campo de golf”, señaló.