LA FIESTA CERVANTINA
“Mi canto trae un mensaje, con él lucho contra la violencia”, señala la intérprete de Benin
Angelique Kidjo llevó el ritmo al último día de actividades del FIC
Activista social de nacimiento, como se considera, llenó con su sensual voz la explanada de la Alhóndiga de Granaditas
Con la música desaparecen los colores de la piel y el idioma, afirma
Ampliar la imagen Angelique Kidjo contagió con su ritmo a los asistentes a la Alhóndiga de Granaditas Foto: Yazmín Ortega Cortés
Guanajuato, 21 de octubre. Al ritmo de rumba congolense, soul estadunidense, afro-pop, reggae y salsa, Angelique Kidjo, la sacedortisa musical, hizo que bailara el público que asistió la noche del sábado a la Explanada de la Alhóndiga de Granaditas.
Desde el comienzo de su presentación en la fiesta cervantina, la intérprete de la República Africana de Benin contagió con la potencia de su voz a los espectadores, quienes a pesar del frío, se animaron a dejar sus asientos para bailar al ritmo de la música.
Kidjo, quien lucha contra la violencia mediante sus interpretaciones, asegura que canta para los humanos, y aunque sus propuestas a veces suelen ser difíciles, el resultado musical es de felicidad. “Mi canto lleva un mensaje, y si lo disfrutan puede que dé frutos”.
Kidjo bailó todo el concierto al son de las percusiones y la guitarra. Su actuación sirvió como preámbulo para lo que se convertiría en una fiesta con el público bailando en el escenario. Niños, jóvenes y adultos disfrutaron cada interpretación de la también embajadora de buena voluntad de la UNICEF.
Con el sabor de la música de Angelique Kidjo se armó la fiesta en el escenario; todos querían bailar con ella, moverse al ritmo de los tambores que tocaba Ibrahima Diagne. Nadie quería dejar de moverse, de disfrutar, de cantarle a la tierra, a la naturaleza.
Activista social de nacimiento, como ella misma se describe, Kidjo calentó con su alegría y ritmo una noche fría en Guanajuato. Una noche que anunciaba el final de la edición 35 del Festival Internacional Cervantino.
En su presentación, la cantante enfatizó que cuando se trata de escuchar música, los colores de la piel desaparecen, lo mismo que el idioma, porque todos escuchamos las mismas melodías, además de que la influencia de África está presente en los diferentes ritmos de nuestro tiempo, como el blues, el rock, el reggae y el jazz.
Nominada en cuatro ocasiones al Grammy, la cantante africana invadió con su sensual voz la Alhóndiga de Granaditas y sus alrededores, donde también se observaba a la gente bailar en sus casas o en la calle.
Angelique Kidjo nació en 1960, en Ouidah, República Africana de Benin. Desde su infancia mostró interés por la actuación y la música, pero fue en París, ciudad a la que se mudó a causa de los conflictos políticos en su tierra natal, donde alcanzó el éxito.
La intérprete señaló que su estética musical está bien fundada en sus raíces, y por eso no le gusta que digan que toca música del mundo. El estilo musical de Kidjo ha tenido influencias variadas de artistas como James Brown, Aretha Franklin, Jimi Hendrix, Carlos Santana, Miriam Makeba y Felakuti.
Durante el concierto, los músicos que acompañan a la cantante tocaron algunas piezas para mostrar los diferentes estilos que domina Angelique Kidjo.
Luchadora por la educación de la mujer en África, la intérprete creó la Fundación Batonga, para que las madres africanas envíen a sus hijas a la escuela. “La fundación no sólo apoya a las mujeres, también a los huérfanos, a los que viven en condiciones de pobreza y a los jóvenes, pero principalmente lo hacemos para alcanzar la equidad de género. Me gusta hacer cosas que duren para siempre”.
Kidjo se presentará el 24 de octubre, a las 20 horas, en el Teatro Angela Peralta de la ciudad de Mazatlán, Sinaloa, dentro de la extensión de las actividades del Festival Internacional Cervantino.