Esta semana enviarán una misiva a Ban Ki Moon
Budistas exigen a la ONU intervenir en Myanmar
Confían en una pronta solución en la nación asiática
Ampliar la imagen Oración en el centro budista de la ciudad de México. Sus integrantes celebraron este domingo el Día contra la represión de Myanmar Foto: Luis Humberto González
En una carta que será dirigida al secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki Moon, la comunidad budista de México solicitó su “más firme y decidida intervención” en Myanmar –antigua Birmania– para buscar soluciones a los problemas generados por la violencia del gobierno militar y reparar las “graves violaciones” a los derechos humanos que se cometen en la nación asiática.
En este momento se están recolectando firmas de apoyo, por lo que la misiva sería enviada a más tardar el jueves.
En el documento se denuncia que en los 45 años recientes el gobierno militar ha ejercido un control absoluto sobre la gente, privándola de derechos ciudadanos que se ejercen en cualquier democracia.
Integrantes de la comunidad budista en México sostuvieron ayer una reunión en sus instalaciones de la colonia Roma e iniciaron la recolección de firmas con una jornada de meditación.
Hace unos días, el Consejo de Seguridad de la ONU “deploró” la violencia del régimen militar de Myanmar contra las “manifestaciones pacíficas” y se pronunció por la liberación de “todos los prisioneros políticos” y por el diálogo entre el gobierno militar encabezado por el general Than Shwe y la lideresa y premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi.
Debate en la ONU
La declaración, aprobada por los 15 miembros del consejo –incluida China, aliada de Myanmar– fue llevada a ese órgano con motivo de las protestas masivas que encabezaron monjes budistas en la ciudad de Rangún, en agosto y septiembre pasados, después de que el régimen decretó un aumento en los precios de combustibles.
Desde 1988 no se había expresado con tanta fuerza en ese país del sureste asiático un movimiento opositor a la junta militar, en el poder desde 1962. La junta militar acusa a los monjes budistas de incitar la represión, que ha generado la detención de unas 3 mil personas.
La comunidad budista en México, integrada por 16 agrupaciones en todo el país (con presencia formal desde hace más de 10 años), apoyó en la reunión de ayer las gestiones de la ONU y denunció las injusticias que se cometen en esa nación, principalmente por la violación de derechos a la libre expresión, de movimiento y de progreso económico.
“Queremos utilizar la oportunidad para reafirmar los principios budistas de paz, de no violencia y de respeto a los derechos humanos, y persistir en nuestra petición de que se logre una solución pronta y pacífica a los problemas de Myanmar.”