“No te dejes, Chente, échales grilla”, consejo de sus vecinos luego de asistir a misa

El jeep rojo reapareció y Vicente Fox enmudeció; “hoy no hay prensa, jóvenes”

Trascendió que el otro vehículo de lujo ya fue entregado por el EMP a miembros del Ejército

Martín Diego Rodríguez (Corresponsal)

Rancho San Cristóbal, Gto., 21 de octubre. El ex presidente Vicente Fox Quesada volvió al rancho San Cristóbal, tras una semana de presentarse ante medios de comunicación en Estados Unidos, donde promovió su libro Revolución de esperanza: la vida, fe y sueños de un presidente mexicano, escrito en inglés bajo el título Revolution of hope. Pero aquí, en su terruño, optó por el silencio.

De nueva cuenta apareció el jeep rojo modelo Wrangler X, con placas de circulación GHK-9354 de Guanajuato, dotado de transmisión manual 4x4, faros de niebla en el roll bar y un bidón de cinco galones en el costado del pasajero; el vehículo es igual al que utiliza el presidente estadunidense, George W. Bush, en su rancho de Crawford, Texas.

Este domingo, el muy mencionado vehículo fue estacionado frente a la casa materna del ex mandatario.

¿Y la Hummer…?

En tanto, fuentes cercanas a la familia Fox confirmaron que la camioneta Hummer color arena modelo 2005, con placas de circulación LYF-6071 del estado de México, fue entregada por los elementos del Estado Mayor Presidencial (EMP) a personal del Ejército Mexicano la mañana del pasado 17 de octubre. La acción ocurrió horas después de que el presidente Felipe Calderón Hinojosa ordenó terminar con los contratos de comodato, figura por la cual la empresa automotriz General Motors habría proporcionado el costoso vehículo para uso del ahora ex presidente.

De buen talante, arropado por cientos de sus vecinos congregados en la plaza principal del pueblo para participar en la feria de las flores organizada por la fundación Vamos México, Fox Quesada permitió que los sancristobalenses lo apapacharan, lo abrazaran, lo saludaran, se tomaran fotografías con él. “¡No te dejes, Chente!, ¡Échales grilla!”, gritaban al paso del ex mandatario, quien correspondió con saludos, sonrisas y apretones de mano a diestra y siniestra. A los reporteros solamente les dijo sin detenerse: “Buenos días, jóvenes, hoy no hay prensa”.

El regalo

Fox Quesada asistió temprano a la misa dominical en compañía de su esposa, Marta Sahagún, y su nieto Vicente Fox Rodríguez. Al salir del templo católico se dirigió tranquilo y sin prisa al frente de la finca familiar. Eso sí, sin permitir preguntas de la prensa, Fox posó para algunas fotografías frente al jeep rojo que, según el empresario mexiquense Luis Miguel Moreno Vélez, fue “un regalo” que pidió Marta Sahagún para celebrar el segundo Informe de gobierno del entonces mandatario, obsequio mediante el cual él recibió favores de la fundación Vamos México.

El vehículo, facturado en 250 mil pesos, fue abordado por Fox Quesada y un elemento del Estado Mayor Presidencial que regularmente lo custodia. Luego de estacionarlo dentro de su propiedad, el guanajuatense salió a pie con su nieto y ambos se encaminaron a un estanquillo del poblado “para comprar chocolates”. Sus vecinos no paraban de desfilar frente al ex presidente, mientras Marta Sahagún Jiménez se mantenía entretenida en la feria de las flores.

Levantó polvareda

Tiempo después, Fox Quesada salió manejando el jeep rojo. A su lado iba su hermano José y en la parte posterior dos elementos del EMP.

Fox Quesada pasó frente a los reporteros que aún lo esperaban; con la mano derecha hizo la “V” de la victoria que lo caracterizó en sus tiempos de campaña política y enfiló el vehículo a su rancho en La Gorda Atorada.

Sus vecinos sancristobalenses lo despedían enjundiosos, aunque a su paso el ex mandatario dejó una gran nube de polvo que cubrió las pocas flores del festival que organizó Vamos México en el poblado este domingo.