Alejandro Encinas, José Murat, Luis Javier Garrido y Gerardo Priego en la UNAM
Persisten dudas por el fallo del TEPJF en 2006
A un año de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) concluyó que la elección presidencial de 2006 fue “válida”, aún existen dudas y confrontación social, coincidieron el perredista Alejandro Encinas y el priísta José Murat.
En tanto que el panista Gerardo Priego aseveró que el proceso electoral del año pasado “desnudó la debilidad de los mecanismos que tenemos como país”, el académico Luis Javier Garrido, aspirante a la rectoría de la UNAM, afirmó que la llegada “ilegítima” de Felipe Calderón a la Presidencia, generó una crisis para el país.
Al participar en una mesa redonda en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, los tres políticos y el académico expusieron su visión a un año del fallo del tribunal. Mientras Murat dijo que por el silencio del PRI no hubo recuento de los votos, Encinas señaló que tras los comicios existe una crisis social, Priego aseveró que el desafuero fue “una pendejada”, porque elevó la popularidad de Andrés Manuel López Obrador, y Garrido, que pese a sus esfuerzos, Calderón no cuenta con autoridad moral.
El académico señaló que la decisión del TEPJF “fue fatal” y es en gran medida la causa de que México viva en una situación actual de confrontación. Subrayó que hoy en el país López Obrador intenta “detener las medidas de desmantelamiento de la nación”, a través de su activismo social, mientras Calderón ostenta “un gobierno ilegítimo que no tiene autoridad política y moral para llevar el gobierno”.
Resaltó que, pese a la reciente reforma, persisten las condiciones para que se repita un fraude electoral debido a que las modificaciones no contemplan cambios a las estructuras del IFE ni del TEPJF.
Aunque Garrido se manifestó en contra, Murat planteó que las dudas se habrían disipado con el recuento de los votos y con una segunda vuelta. Indicó que la problemática nacional crece, sobre todo en pobreza y en inseguridad.
Encinas, candidato para dirigir al PRD, agregó que tras la campaña mediática contra López Obrador por el PAN y un sector del empresariado, se creó una polarización social que sacó a la luz un conflicto de clases; además de que a un año del fallo del tribunal (que se cumplió ayer) hay una profundización de la crisis, pues cada vez hay menos desarrollo económico y social.
En tanto, Priego, aspirante a la dirigencia blanquiazul, recalcó que los partidos no deben tener miedo a las alianzas. Subrayó que el PAN tiene más coincidencias con el PRD que con el priísmo. “Mientras perredistas y panistas discutimos, el PRI camina. Creo que hay alianzas importantes que podríamos hacer PRD y PAN y no las hacemos”, por la pelea entre ambos bandos tras la elección presidencial de 2006.