Fueron enviados para damnificados del huracán Lorenzo
Descarta el DIF-Veracruz devolver ataúdes; serán para familias pobres
El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Veracruz no devolverá a su par nacional los 100 ataúdes que envió en “apoyo” a los damnificados del huracán Lorenzo –pese a que no ocasionó decesos– y por las inundaciones en el norte del estado, y los entregará a familias de escasos recursos que sufran la pérdida de un familiar.
Así lo informó Francisco Naredo Galindo, director de Atención a Población Vulnerable del DIF estatal, quien dijo que “ahí los tendremos, para lo que haga falta; afortunadamente no hemos ocupado ninguno”.
En entrevista, el funcionario recordó que los féretros fueron la “única ayuda que ha enviado la Federación para atender la contingencia en la entidad, pese a la petición para que se mandaran víveres y ayuda en especie”.
Hasta ahora, insistió, el DIF nacional no ha enviado alimentos ni ayuda humanitaria en especie, y los únicos apoyos del gobierno federal se esperan mediante los recursos que libere el Fondo Nacional de Desastres Naturales.
Mientras, la subsecretaría de Protección Civil estatal emitió una alerta preventiva a los 212 municipios de la entidad por la proximidad del frente frío número 3, así como un sistema de baja presión sobre el suroeste del Golfo de México, que incrementará el potencial de lluvias a partir de este viernes.
Se desborda río en Oaxaca
El río Ostuta se desbordó la tarde de ayer en el municipio de San Francisco Ixhuatán, Oaxaca, en la región del istmo de Tehuantepec, inundando alrededor de 70 viviendas del barrio Ostuta, informó el director de Protección Civil, Martín Vega Gil.
Esa vía fluvial, señaló, incrementó su caudal en dos metros y 70 centímetros a causa de las lluvias provocadas por el paso de la onda tropical número 37, por lo que la dependencia a su cargo, junto con las autoridades municipales, acondicionó seis albergues para atender a unas 350 personas afectadas.
Avanza Kiko hacia Manzanillo
La tormenta tropical Kiko avanza hacia las costas del Pacífico mexicano y, según pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional, en las próximas horas se fortalecerá y el sábado tocaría tierra como huracán categoría uno –en la escala Saffir Simpson– en el puerto de Manzanillo, Colima.
Debido a la trayectoria del meteoro, que tiene vientos sostenidos de 65 kilómetros por hora con rachas de 85 kilómetros por hora, la navegación fue restringida en Lázaro Cárdenas, Michoacán, donde se espera que en las próximas horas aumenten las lluvias y el oleaje, informó la Unidad Estatal de Protección Civil.