Usted está aquí: lunes 15 de octubre de 2007 Deportes El América del Ruso Brailovsky salió en medio de abucheos del estadio Azteca

Hoy perdimos, nadie puede estar satisfecho con el juego, reconoció el estratega local

El América del Ruso Brailovsky salió en medio de abucheos del estadio Azteca

El Turco Antonio Mohamed se fue contento con el desempeño de sus pupilos

Rosalía A. Villanueva

Ampliar la imagen El americanista Lucas Castromán cayó aparatosamente ante la fuerte marca de la zaga de los Tiburones Rojos. Tanto los capitalinos como los de Veracruz no pudieron hacer gol y el descontento del público se tradujo en silbidos y protestas El americanista Lucas Castromán cayó aparatosamente ante la fuerte marca de la zaga de los Tiburones Rojos. Tanto los capitalinos como los de Veracruz no pudieron hacer gol y el descontento del público se tradujo en silbidos y protestas Foto: Notimex

Una sonora rechifla del público despidió al América en el estadio Azteca al terminar empatado sin goles con unos Tiburones Rojos de Veracruz que fueron superiores y que merecían ganar, como lo señaló su técnico Antonio Mohamed.

Tarde de rencuentros y contrastes, en la que dos argentinos hicieron su debut en el torneo local, pero sin ganar.

Quien quedó a deber fue Daniel Alberto Brailovsky, pues “sufrió” desde la tribuna el mal paso de su equipo que se quedó con 10 hombres, tras la expulsión de Germán Villa en la primera parte.

El Ruso cumplió un castigo que estaba pendiente desde sus tiempos en Veracruz y reconoció al final que el partido se les complicó por tener un hombre menos. Calificó de “rigorista” el arbitraje de Germán Arredondo y, en cambió, tuvo elogios para Veracruz, al que le dio el “mérito” por la forma en que jugó; del resultado de su escuadra sostuvo: “no es excusa, no nos vamos contentos, hoy perdimos”, agregó el estratega sin cumplir la promesa de ofrecer un nuevo América, más ofensivo.

Los dirigidos por Mohamed dieron un excelente juego en la primera parte, dejaron varias veces tendidos a los anfitriones, que se vieron inferiores y recibieron abucheos de una afición que llenó tres cuartas partes del inmueble, gracias a la promoción que hubo en la semana con la Copa Sudamericana, con boletos a 50 pesos por dos partidos.

Con las llegadas de Andrés Ríos, pero sin concretar, los porteños se fueron al ataque, aunque se les negó el gol.

Vendría otro ataque jarocho. Luis Ángel García mandó disparo de larga distancia, que Armando Navarrete rechazó. En tanto, América, con el joven Juan Carlos Mosqueda, quien surtió varios centros por la banda izquierda, se vieron nulos ante la inasistencia de sus compañeros hacia el marco de Fabián Israel Villaseñor, quien evidenció la ineficacia de Rodrigo López en un par de ocasiones.

Para colmo, los de Coapa se quedaron con un hombre menos, sin Germán Villa, quien ya cargaba una amarilla, luego que le dio un manotazo a Luis Ángel García, y Arredondo lo expulsó, casi al concluir la primera mitad.

La parte complementaria fue de mal en peor y ambos cuadros hicieron sus cambios. Casi al final del encuentro América tuvo una clara llegada en los pies de Rodrigo López, pero se engolosinó.

En tanto que Héctor Mancilla, de Veracruz, perdonó frente a la meta de Navarrete y se fue la anotación que pudo dar a su equipo la victoria que no conocen hace ocho fechas.

En conferencia de prensa, Brailovsky justificó que apenas tiene seis días de trabajo con América, que se pudo haber ganado y este empate le dejó un sabor amargo.

“Nadie en América puede estar contento –insisto– hoy perdimos”, reconoció Brailovsky, quien prometió que desde ahora “voy a portarme bien” porque no es lo mismo dirigir desde la tribuna que en el terreno de juego, donde fue auxiliado por Fernando Huerta.

Por cierto, en la conferencia de prensa el Ruso dedicó más tiempo a tomarse fotos e intercambiar palabras en corto con los reporteros de su país.

Todo lo contrario Mohamed, quien se presentó elegante y bonachón. El Turco agradeció la oportunidad que le dio la directiva jarocha, sobre todo a Alberto de la Torre, quien fue abordado en el pasillo y pidió apoyo para el estratega argentino en lo que resta del torneo y el siguiente.

Por cierto, tras prometer que ahora sí terminará los dos cursos que le faltan para ser entrenador, Mohamed dijo sentirse “muy contento. No por el empate sino por el rendimiento de los jugadores”, que le sirvió para cortar una mala racha de derrotas.

Al finalizar dijo que su equipo piensa en el repechaje, por el panorama que se le presenta.

 
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