Destina 76 millones de pesos al consejo técnico: informe del “gobierno legítimo”
Señalan que la crisis en el IMSS es por gastos de directivos, no por pensiones
Por $3 mil 453 millones, el pago a equipo de Molinar y personal de confianza, afirma
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) gasta 20 millones de pesos al año en pagos a los miembros de su consejo técnico, integrado por representantes sindicales y empresariales –como la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex)–, así como funcionarios federales, a los cuales entrega además 56 millones de pesos en el mismo periodo para gastos operativos, de los cuales “no tienen que justificar 32 millones”.
Un informe de la secretaría del trabajo del “gobierno legítimo”, encabezada por Bertha Luján, revela lo anterior y señala que la dirección del IMSS insiste en la existencia de una profunda crisis financiera, que atribuye en gran medida al régimen de pensiones de los trabajadores, pero olvida muchas otras fugas de dinero.
El titular del organismo, Juan Molinar Horcasitas, “no menciona jamás que el costo anual para el instituto de su equipo de dirección, incluyéndolo a él, es de 2 mil 102 millones de pesos. Si a ello se añade el personal de confianza, con salarios por encima de 50 mil pesos, tenemos un gasto de 3 mil 453 millones de pesos”, indica la información.
La reducción de esos gastos representaría un gran potencial de ahorro en el contexto de una política de austeridad institucional, abunda.
Entre las erogaciones que se podrían disminuir, sugiere, están las del consejo técnico, que gasta los mencionados 20 millones de pesos al año en emolumentos y dispone además de 56 millones para operación en ese lapso.
Por otra parte, de acuerdo con el documento, también se pasa por alto que la reforma al IMSS de 1995 bajó las cuotas a los empresarios, contribuyendo de esa forma a su descapitalización, y tampoco habla de los adeudos de los patrones con el organismo, que en 2006 fueron de 13 mil 459 millones, sin contar la evasión y elusión de obligaciones.
El texto considera que el instituto y su sindicato deberían hacer un análisis objetivo de la situación financiera actual, para encontrar soluciones conjuntas que lleven al fortalecimiento, y no a la degradación del organismo.
Señala que la pasada revisión contractual el IMSS fue un pretexto para una nueva ofensiva de este gobierno de derecha contra las instituciones públicas de seguridad social, ya que uno de los argumentos esgrimidos por Molinar Horcasitas es que la ley le impide contratar más trabajadores si el sindicato no acepta modificar una vez más el régimen de jubilaciones y pensiones.
El informe indica que el principal promotor de la modificación de ese régimen fue el ex director del IMSS Santiago Levy, quien pugnó por una reforma integral al sistema de pensiones de los trabajadores del organismo para que se instaurara un esquema de cuentas individuales en las Afore, con el fin de que cada trabajador y nadie más contribuyera con dinero para su futura pensión.
Es un planteamiento extremo, según el texto, que se impuso con la reforma neoliberal de los sistemas de pensiones que el gobierno de Augusto Pinochet impuso a los trabajadores chilenos en plena dictadura.
Por ello, dice, aceptar la propuesta de que los futuros trabajadores financien sus pensiones sólo con sus aportaciones es una amenaza contra todos los asalariados. Es más, abunda, aun en las leyes reformadas del IMSS y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado se mantienen las contribuciones tripartitas para las pensiones.