Le complace el triunfo sobre el Vasco da Gama
Ante Veracruz puede ser la última llamada: Davino
Contra el cuadro brasileño se notó el cambio: Ruso
“Cuando ganamos vienen poquitos”, se quejó de entrada el defensa Duilio Davino, en su cita con los medios de comunicación tras el entrenamiento vespertino de ayer en Coapa.
El América dio un paso adelante en la Copa Sudamericana, luego de vencer la víspera 2-0 al brasileño Vasco da Gama, pero en el torneo mexicano su situación es distinta. Tanto, que Davino piensa que el compromiso del domingo ante Veracruz “puede ser la última llamada. Si no ganamos ya será difícil” pasar a la liguilla. “Tenemos que sumar de tres puntos, sí o sí”, advirtió.
Aseguró que la idea es jugar como el miércoles: agobiando al rival, porque para el nuevo técnico Daniel Alberto Ruso Brailovsky ese es el cambio “que queremos impulsar” y contra “los brasileños se notó”.
El timonel insistió en dar todo el mérito del triunfo a los jugadores –“yo no gané absolutamente nada”– e inclusive puso un ejemplo de cómo a veces se logra el éxito ignorando las explicaciones del estratega.
Explicó que en los tiros de esquina Davino debía “ir hacia el primer palo. Fue una vez, dos, tres, cuatro y la pelota no calló. Avanzó hacia el centro e hizo el gol; a eso es a lo que voy cuando les insisto en decir que el jugador termina decidiendo en la cancha”.
Dijo que su aportación es el trabajo, la parte mental “y convencer a los futbolistas de que el sistema que vamos a emplear es el bueno”.
El ariete Santiago Fernández, en tanto, señaló que “la mano del técnico se ha visto. La idea que trae es muy clara: viene a atacar, nos ha dicho desde el principio eso y el planteamiento es diferente, a lo mejor se juega más alegre”, aunque apenas va un partido con Brailovsky al frente.
Por su parte, Rodrigo López reconoció que después de una victoria “se trabaja de otra manera, con más tranquilidad”, pero no deben bajar la guardia porque “no hemos ganado nada todavía.
“En la Copa Sudamericana dimos un paso importante”; sin embargo, “la llave todavía no está cerrada” porque falta el partido de vuelta en la cancha del conjunto brasileño.
El delantero también dijo que les falta saldar una deuda pendiente que tienen al no ganar todavía de visitantes en el torneo local.