La llamada terciarización viola la LFT: investigadores
Creció 300% número de empresas que subcontratan trabajadores
Durante la década pasada, en México el fenómeno de la terciarización o subcontratación ha tenido un crecimiento explosivo, tanto en lo que se refiere a la proliferación de empresas que usan este sistema, como en el número de personas que son subcontratadas, señalaron Alejandro Espinosa Yáñez, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)-Xochimilco, y Mateo Dean, investigador del Centro de Acción Laboral y Asesoría Sindical (Cilas).
En conferencia de prensa ofrecida para conmemorar los 17 años del Cilas, los expertos precisaron que desde 1998 a la fecha la cantidad de mexicanos que son contratados por una empresa para laborar en otra se ha incrementado 40.1 por ciento, según datos gubernamentales, mientras que el número de firmas que se dedican a la subcontratación se ha elevado en cerca de 300 por ciento”.
De acuerdo con Dean, se calcula que más de “3 millones” de trabajadores mexicanos laboran bajo el esquema de la terciarización, el cual tiene como “principal finalidad eludir los compromisos establecidos en la Ley Federal del Trabajo (LFT)”.
En opinión de los especialistas, los cuales presentaron la investigación denominada Outsourcing en México, la mayoría de quienes son contratados con esa modalidad no gozan de las prestaciones de ley, tales como pago de aguinaldo y primas vacacionales, incluso algunos ni siquiera tienen vacaciones, tampoco generan antigüedad ni se les dan liquidaciones cuando se rompe la relación laboral.
También están más expuestos a los “abusos patronales”, pues el verdadero patrón, el que le da las órdenes, no es el que firma el contrato, y esa situación propicia los referidos excesos en el trato.
Espinosa Yáñez remarcó que es en los lugares en donde hay mayor concentración del capital en donde se da con mayor énfasis la subcontratación un caso es “Quintana Roo en donde 20 por ciento de los trabajadores del área de servicios y hotelería está bajo esa modalidad”.
Dean expuso que esto violenta artículos de la LFT, tales como el 12, 14 y 15, los cuales se refieren a las responsabilidades solidarias entre patrones y contratados.
Alejandro Vega, integrante de la directiva de Cilas, citó el caso de Banco Bilbao-Vizcaya, el cual calificó como “escandaloso”, pues se refiere a la modalidad de crear dentro una empresa, otra empresa encargada sólo de contratar personal.
En dicho banco, dijo,“a los trabajadores les informaron que a partir de un determinado día ya no laboraban para el banco, sino una empresa llamada operadora Bancomer; con todas las implicaciones que eso implica, ya que por ejemplo normalmente recibían tres meses de salario cada año como reparto de utilidades, ahora no recibirán nada porque la empresa contratista no tiene utilidades”.