El desarrollo verdadero debe preservar el medio ambiente, dice ante empresarios

Aplaza Calderón hasta 2030 la meta sobre un sistema universal de salud

El Presidente dio inicio a obras del hospital de alta especialidad en Tamaulipas en predio donado por un primo del gobernador

Claudia Herrera y Jesús M. Treviño (Enviada y corresponsal)

Ciudad Victoria, Tamps., 5 de octubre. Será en 2030 cuando México tenga un sistema de salud integrado y universal, según establece el Programa Nacional de Salud sexenal, con lo que se alarga 20 años el cumplimiento de esta meta trazada desde el gobierno anterior.

“No alcanzaremos la cobertura universal a la vuelta de un gobierno, pero sí podemos empezar gradualmente”, señaló el presidente Felipe Calderón durante la presentación del documento.

El mandatario inauguró en esta ciudad las obras del Hospital Regional de Alta Especialidad de Tamaulipas pero, de hecho, puso la segunda piedra, porque en mayo de 2006, el entonces presidente Vicente Fox ya había colocado la primera durante la ceremonia de donación del terreno.

La edificación de este hospital en el ejido Guadalupe Victoria ha generado polémica, porque las cuatro hectáreas del terreno donde se asentará fueron donadas por Pedro Luis Garza, primo y ex secretario técnico del gobernador Eugenio Hernández Flores. Garza posee otras 200 hectáreas que verán aumentado su valor con este proyecto.

En esta ceremonia, Hernández Flores llenó de elogios al michoacano, a quien llamó su “gran amigo” e hizo que los asistentes lo aplaudieran de pie. También le agradeció que cuando era director de Banobras empezó a promover un esquema de inversión público-privada para la edifición y operación de hospitales.

Regaño a Molinar

Calderón aprovechó la presentación del programa para llamar la atención a sus secretarios de Estado cuando dijo que “les ha pedido que no se avienten rollos ni generalidades, sino que pongan metas concretas” en los planes sectoriales.

El titular del Instituto Mexicano del Seguro Social, Juan Molinar Horcasitas, se llevó una amonestación directa cuando cuchicheaba con el titular de la Secretaría de Salud (Ssa), José Angel Córdova Villalobos. Al percatarse, el Presidente interrumpió su discurso y le dijo: “ya, ya, tranquilo. Está nervioso por la negociación del Seguro”, en referencia al proceso de revisión salarial con los trabajadores del instituto.

En cuanto al Programa Nacional de Salud, el michoacano dijo que traza una estrategia viable para transformar el sistema en la materia sobre “bases sólidas, realistas y responsables”.

Culpó a los gobiernos anteriores de no haber desarrollado la infraestructura en salud que necesitaba el país cuando, paradójicamente, creció más la población. Dijo así que en los pasados 25 años se escribió una “historia triste” en la era moderna de México a causa de las crisis y los índices de inflación imparables.

Pero aseguró que su gobierno asumirá con responsabilidad el “enorme rezago” de la nación en la materia, y a partir de ello el propósito es “avanzar con firmeza y determinación a la cobertura universal de salud”.

Incumplimiento del Seguro Popular

Sin embargo, el programa señala que será hasta 2030 cuando México cuente con un sistema de salud integrado y universal que garantice a toda la población el acceso a servicios esenciales, no obstante que el gobierno de Fox se había planteado cumplir esta meta en 2010, como parte del Seguro Popular.

Para ello, el programa planteado para 2012 establece un decálogo de metas, del que destaca el compromiso de este gobierno de revisar el marco legal vigente para facilitar la integración del sistema universal de salud.

Calderón estableció cuatro ejes: mejorar las condiciones de salud de la población, reducir las desigualdades, ampliar la cobertura mediante el Seguro Social, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado y el Seguro Popular, así como convertir a la salud en un activo para superar la pobreza.

Puso de ejemplo el Programa de Salud, porque plantea metas concretas y no “rollo”. Mencionó entonces que su gobierno se propone que el promedio de esperanza de vida pase de 75 a 77 años al final del sexenio.

Antes, el titular de la Ssa presentó un diagnóstico grave sobre la salud de los mexicanos al señalar que se enfrenta una “gran epidemia de diabetes, sobrepeso y obesidad”.

La IP, “consternada” por el veto a edificar en manglares

Angeles Cruz Martínez

El progreso del país está directamente vinculado con la protección del medio ambiente y la promoción de la riqueza natural que posee, lo que también es la vía para superar la pobreza, advirtió el presidente Felipe Calderón Hinojosa, quien además se manifestó como “ferviente seguidor de todos los mecanismos que económicamente puedan impulsar la defensa del medio ambiente”.

Así respondió el mandatario a los señalamientos que minutos antes le había hecho Gordon Viberg Maceran, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), respecto a la “gran consternación” que causó en el sector el artículo 63 de la Ley de Vida Silvestre, que prohíbe la construcción de obras sobre superficies de manglares.

El intercambio ocurrió durante la ceremonia de clausura del séptimo Congreso Internacional de Turismo, efectuado en el hotel Sheraton del Centro Histórico, al que el mandatario tuvo que entrar por la puerta trasera para evitar a los simpatizantes de Andrés Manuel López Obrador, quienes con consignas y mantas le hicieron patente su rechazo.

“En la resistencia está la inteligencia”, decían, y también: “Ya lo dijo Ugalde, que hubo fraude”. Eran dos los grupos de personas que ayer impidieron que el Presidente ingresara al inmueble por la puerta principal, en Avenida Juárez. Uno de los grupos se ubicó frente a dicho acceso con carteles que mostraban la imagen de López Obrador portando una banda presidencial, y una manta que rezaba: “Calderón, cumple tus promesas, o por el bien del pueblo, renuncia por mentiroso, por traicionar la democracia y al trabajador”.

Otra decena de simpatizantes del “presidente legítimo” se ubicó sobre la acera del parque de la Solidaridad, al otro lado de la avenida Juárez, y desde ahí también gritaban “¡Es un honor estar con Obrador!”.

Como en otras ocasiones en que se han dado expresiones de este tipo, ayer también había una fuerte presencia policiaca y vallas que restringían el paso de los transeúntes sobre el tramo de la calle donde se encuentra el hotel.

Una vez adentro, y luego de la comida con que se clausuraron los trabajos del congreso, el michoacano habló ampliamente sobre la importancia del sector turístico en la economía nacional, aunque puntualizó que “no hay desarrollo verdadero si éste no es sustentable y armónico con la naturaleza, y lo mismo pienso del turismo”.

Antes había resaltado las diversas acciones emprendidas por su administración para impulsar la actividad turística, a la que ubicó como importante fuente de generación de empleos. Comentó que ya se cumplió la meta de crear entre 600 y 800 mil fuentes de trabajo en este año. Incluso –dijo–, ha sido superada, pues hasta septiembre el Instituto Mexicano del Seguro Social tenía un registro de 879 mil nuevos empleados formales.

Respecto al turismo, señaló que es un sector en expansión. “Lo será por mucho tiempo, y México está obligado a aprovechar el potencial de crecimiento que tiene la industria en el mundo”, así como las ventajas de sus riquezas naturales.

Se trata –abundó– de crear capacidades y oportunidades para los mexicanos de hoy sin comprometer a las generaciones futuras; es construir sin destruir la naturaleza, subrayó.

Viberg se refirió al conflicto actual entre la protección de la ecología y el desarrollo del turismo, el urbanismo y las comunicaciones, y resaltó que la combinación de estos factores es un reto para el país.

Entre otras peticiones al Presidente, el empresario mencionó la necesidad de una nueva ley de turismo que transfiera a las entidades las cuestiones ejecutivas y el Estado se mantenga como coordinador. También solicitó para los inversionistas un trato fiscal igualitario y simplificación administrativa.

Por su parte, Calderón –en un discurso improvisado– reconoció que el turismo debe ser un negocio rentable para el que lo realiza y para el progreso del país. Con el éxito del sector también va gran parte de la suerte de millones de mexicanos, dijo.

Se refirió a la situación de miseria en que viven millones de mexicanos, la cual está vinculada con el deterioro del medio ambiente y con la necesidad que tienen las comunidades marginadas de subsistir, que para lograrlo tienen que destruir el medio ambiente que los rodea.

Luego de años de políticas públicas que premiaron actividades como el reparto y el desmonte de bosques y selvas, ahora el combate de la pobreza extrema debe convertirse en una vía para preservar la naturaleza con la generación de alternativas de ingreso a través del turismo ecológico.

Calderón también resaltó que quienes más sufren la destrucción de la naturaleza son los mexicanos que viven en condiciones de miseria, por la falta de agua y la agresividad de los cambios climáticos pues son los primeros cuyas casas se ven arrasadas por el crecimiento inusitado de los afluentes de los ríos.