Presentan al Senado iniciativa para modificar los artículos 3, 24 y 130 de la Constitución

Presionan católicos para que por ley los curas puedan asociarse con fines políticos

Se dicen independientes, pero en el acto estuvo presente el vocero de la arquidiócesis

Elizabeth Velasco C.

El Colegio de Abogados Católicos de México presentó ayer al Senado de la República una propuesta de reforma a los artículos 3, 24 y 130 de la Constitución, mediante la cual se propone que en las escuelas públicas se imparta educación religiosa, se garantice la libertad de las personas de manifestar sus creencias religiosas, que los ministros puedan asociarse con fines políticos y desde el púlpito puedan intervenir en la vida política del país, inclusive “oponerse a las leyes del país o a sus instituciones”.

Armando Martínez, presidente de esa organización, dijo que se trata de una iniciativa ciudadana, sin el apoyo de la Iglesia católica o de otra religión, aun cuando en la rueda de prensa se encontraba Carlos Villa Roiz, vocero de la Arquidiócesis de México, la cual mediante su semanario Desde la fe ha criticado las “insuficiencias” de la Ley de Asociaciones Religiosas y se ha pronunciado por una reforma en esa materia, además de poder acceder a ser propietarios de medios de comunicación.

De acuerdo con la propuesta entregada al Senado, se sugiere que la redacción del artículo tercero Constitucional sea el siguiente: “Garantizada la libertad de religión por el artículo 24, dicha educación será aconfesional; sin embargo, en la educación básica que imparta el Estado se podrá, a petición de los padres o tutores, impartir educación religiosa en las escuelas públicas, de acuerdo a la solicitud de estos mismos y respetando la no imposición de la misma (sic)”.

En cuanto a la modificación del artículo 130, la propuesta de los abogados católicos indica: “Los ministros podrán asociarse con fines políticos. Asimismo, en reunión pública, actos de culto o de propaganda religiosa, o en publicaciones de carácter religioso, podrán oponerse a las leyes del país o a sus institucionales (sic). No podrán agraviar, de cualquier forma, los símbolos patrios”.

Respecto del artículo 24 constitucional, sugieren que se exprese que “toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia”.

Según Martínez Gómez, la reforma es necesaria porque el país se ha quedado “rezagado” en materia de libertad religiosa, si se le compara con países vecinos, y es urgente que la religión se convierta “en una matriz cultural y deje de ser vista como el opio del pueblo”, dijo.

El dirigente de los abogados católicos comentó que las reformas que propone a esos artículos se sustentan “en cuatro instrumentos internacionales que han universalizado el principio de la libertad religiosa en el siglo XX”, entre los cuales refiere la Declaración Universal de los Derechos Humanos, específicamente el artículo 18, el cual propone se adopte en forma íntegra en el artículo 24 de la Constitución mexicana.

“Una reforma de este tipo representa, además de una prueba, la necesidad de modernizar y replantear la relación entre el Estado mexicano y las Iglesias”, aseguró Martínez.