Por primera vez muestran obras de los hermanos Castro Leñero e Irma Palacios

Sigue festejo de la Galería Pecanins, ahora con artistas de los años 80

Hasta el 10 de octubre mostrarán creaciones de 10 artistas de esa década

En 43 años las dueñas del recinto tienen anécdotas como la de una señora que quería un cuadro del color de un sillón

Merry MacMasters

En aras de celebrar su 43 aniversario, con la idea de reforzar la memoria, a principios de este año la Galería Pecanins, ubicada en Durango 186, colonia Roma, emprendió una revisión de las décadas que le ha tocado vivir.

Si primero fueron 10 artistas 60’s-70’s. Ahora y hasta el 10 de octubre, se exhibe la exposición colectiva 10 artistas de los 80’s, aunque no todos los creadores que forman parte de la muestra han exhibido en forma individual en la galería, como es el caso de los hermanos Alberto, Francisco y José Castro Leñero, e Irma Palacios. Completan el conjunto: Miguel Ángel Alamilla, Ana Checchi, René Freire, Ilse Gradwohl, Gabriel Macotela y Santiago Rebolledo.

Si Ana María y Teresa Pecanins, dueñas del recinto, quisieron seguir con la revisión es porque al cerrarse una década “parece que la gente se olvida de lo que ha pasado”, cuando habría que sacarle “provecho”.

Para Teresa Pecanins, “ahorita los coleccionistas están muy perdidos. Los artistas siempre han sido emergentes, empezando por Marcel Duchamp. Ahora, toda la gente está enloquecida con lo emergente. Al revisar los catálogos de las ferias de arte, ya no se ve pintura, sino cosas raras. Me parece muy interesante, pero no hay que olvidar que los buenos pintores existen todavía. Todo ese grupo de los 80 sigue activísimo”.

Intercambio de artistas

Las hermanas Pecanins no tenían obra, por ejemplo, de los Castro Leñero porque “nunca fueron de nuestra galería”. Pero, para la exposición se tenía que unir “todo el mundo”. Teresa se remonta a las décadas de los 60 y 70, cuando “éramos muy amigos con Juan Martín, con Inés Amor, e intercambiábamos artistas, o hacíamos exposiciones conjuntas, o si querían un Roger von Gunten los mandábamos allá, o si alguien quería un Rocha, venían aquí.

“Hoy día hay mucha distancia. Por ejemplo, cuando se inauguró la galería OMR, así como otros recintos galerísticos aquí cerca, e hicieron el corredor de la Roma, no incluyeron ni a la Galería Metropolitana ni a la Pecanins.”

–¿Cómo es tu relación con los artistas?

–Cuando un artista entra con nosotros, queremos seguirlo y que vea que ésta sigue siendo su galería. No vamos tanto en la búsqueda de que si aquél hace esto también lo voy a hacer. Siempre hemos tenido nuestra propia imaginación, nuestra propia manera de pensar, sentir y ver el arte. La galería más bien siempre ha sido abstracta más que figurativa. Cuando hubo una época en que todos hacían cosas figurativas, tampoco le entramos.

–¿A qué se debe ese apoyo a lo abstracto?

–En lo personal el arte abstracto no me cansa nunca. Lo figurativo sí porque las figuras son repetitivas. No desprecio lo figurativo, pero me gusta más cómo, por ejemplo, podríamos poner un poco figurativo a Joy Laville, pero tiene un estilo; Roger von Gunten y Brian Nissen, igual, pero tienen un estilo. Pero hubo un momento en los años 80, creo que por el arte chicano, y Frida Kahlo contagió a mucha gente. A mí no me contagió.

–Si alguien llega a la galería, se topa con el arte abstracto y dice no entenderlo, ¿qué hacen ustedes?

–Le decimos que se pasee un rato más por las galerías y después lo entenderá. Si el color o la forma o los movimientos le interesa, es que ya está aprendiendo. En los inicios de la galería tuvimos algunos encuentros de este tipo, como de una señora que preguntó por un cuadro que tuviera colores verdes, “porque tengo un sofá verde. No, no tenemos”. Todo eso ya pasó.

Deprimente, vender obra para decorar

“Me gusta que alguien venga y pregunte, ¿tienes a tal artista? Por lo general, la gente que viene aquí no busca obra para decorar, porque es coleccionista. Entonces, es más divertido, no es tan deprimente que te digan ‘quiero un cuadro para combinar con mi sofá’”.

Es muy probable que en 2008 las galeristas continúen con su revisión, ahora de la década de los 90, que piensan ligar con el año 2000.