El ex funcionario es ahora director de Telefónica para México y CA; posible albazo legislativo
Presiona Gil Díaz para adecuar leyes que permitan abrir al extranjero la telefonía
Se propiciaría la ruptura del mercado que controla Telmex; se crearía otro duopolio: PRD
La presión ejercida por el ex secretario de Hacienda Francisco Gil Díaz, quien ahora dirige la trasnacional Telefónica Movistar para México y Centroamérica, está a punto de provocar modificaciones a las leyes de Inversión Extranjera y Federal de Telecomunicaciones, impulsadas por los grupos parlamentarios de los partidos Revolucionario Institucional, Nueva Alianza y Convergencia en la Cámara de Diputados, y es que se pretende abrir al ciento por ciento la participación de capitales extranjeros en las actividades de telefonía fija, televisión y radio.
El dictamen de modificación a las citadas legislaciones se someterá al pleno de las comisiones de Economía, de Comunicaciones y de Radio y Televisión el próximo 3 de octubre, para en conjunto obviar trámites de aprobación y enviarla al pleno camaral. De ocurrir tal procedimiento se concretaría un albazo legislativo que tuvo su origen apenas el pasado mes de junio.
La iniciativa, elaborada por los diputados Mauricio Ortiz Proal y Víctor Manuel Palma, del PRI; José Luis Aguilera Rico, de Convergencia, y Miguel Angel Jiménez, de Nueva Alianza, intenta reformar el inciso X de la fracción tercera del artículo séptimo, y la fracción IX del artículo octavo de la Ley de Inversión Extranjera, así como el artículo 12 de la Ley Federal de Telecomunicaciones. En este último ordenamiento se manifiesta lo siguiente: “Se requiere resolución favorable de la Comisión Nacional de Inversiones Extranjeras para que la inversión extranjera participe en un porcentaje mayor al 49 por ciento de las actividades económicas y sociedades que se mencionan a continuación…”
Tal propuesta propiciaría la ruptura del mercado que controla Teléfonos de México (Telmex), para entonces abrir el mismo a la trasnacional española Telefónica Movistar, que si bien pretende participar al ciento por ciento en el mercado en México, en su país de origen ha sido acusada de prácticas monopólicas, y es la principal promovente de evitar la reciprocidad que implicaría abrir en España el mercado, también, a Teléfonos de México. A la fecha, Telmex ha sido impedida de participar en actividades concernientes al mercado de las telecomunicaciones en aquella nación.
No obstante, en un oficio fechado el pasado 17 de julio de 2007, la Comisión Federal de Competencia (Cofeco) respaldó la iniciativa promovida por Mauricio Ortiz Proal –hijo del ex dirigente nacional priísta Fernando Ortiz Arana–, quien se ha puesto a la cabeza del proceso legislativo que permitiría hacer participar a Telefónica Movistar en un mercado cuyo valor alcanza cada año los 20 mil millones de dólares: “Esta autoridad estima positivo el hecho de que se permita una mayor inversión extranjera en el sector en los términos que la iniciativa propone reformar.”
Sobre el particular, el diputado del Partido de la Revolución Democrática Alejandro Sánchez Camacho advirtió que la reforma propuesta por el PRI, Nueva Alianza y Convergencia generará un duopolio difícil de controlar. “Se quiere hacer creer a los legisladores que con una mayor competencia en el sector de telefonía fija y servicios relacionados (audio, datos y video) es posible lograr el propósito de una mayor calidad en los servicios y precios más bajos para el consumidor final, y también para los micro, pequeños y medianos empresarios. El duopolio televisivo y el oligopolio radiofónico son ejemplo de las empresas nacionales e internacionales que se anidan en México para someter al gobierno en sus tres niveles, y a un público consumidor que es el más perjudicado.”
No obstante, Eduardo Pérez Motta, presidente de la Comisión Federal de Competencia, estableció coincidencia con la exposición de motivos de la iniciativa, “y con las medidas encaminadas a fortalecer la inversión extranjera en el sector de telecomunicaciones”. Asimismo, considera que la iniciativa implica un avance importante en el fortalecimiento del proceso de competencia y libre concurrencia en el sector.
La exposición de motivos de la iniciativa manifiesta que México figura, de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, entre los países con las tarifas de telefonía fija más altas entre las naciones miembros de ese organismo, y que las restricciones actuales afectan a los concesionarios de servicios de telecomunicaciones, en cuanto al acceso de capital para financiar sus operaciones e inversiones en infraestructura y servicio. “Es importante resaltar que no se pretende abrir la inversión extranjera a ninguna nueva actividad, sino únicamente permitir su participación mayoritaria en actividades en las que ya participa.”
El pasado 30 de mayo, en una conferencia auspiciada por The Economist, Francisco Gil, presidente de Telefónica, anunció que ya se encontraba acabada una iniciativa que daría la posibilidad de abrir al capital extranjero el sector de telefonía fija. Dos semanas después, el 13 de junio, se presentó la iniciativa impulsada por Mauricio Ortiz, con objeto de reformar la Ley de Inversión Extranjera.
Entre finales de julio y mediados de agosto funcionarios de la Secretaría de Economía, en acuerdo con los diputados promoventes de la iniciativa, emprendieron un arduo cabildeo para conseguir el respaldo de los legisladores. Entre los promoventes del documento se encuentran Miguel Angel Toscano, ex diputado del Partido Acción Nacional y ahora secretario técnico de Planeación, Comunicación y Enlace de la SE, y Carlos Arce, ex procurador federal del Consumidor.
El 22 de agosto, pese a la reticencia del PRD, la Comisión de Economía –en su mayoría integrada por priístas y panistas– avaló la propuesta que permitiría la inversión extranjera en telefonía fija. Con el correr de los días el citado órgano legislativo elaboró el texto definitivo, donde se argumenta que la reforma contribuiría a fomentar postivamente las condiciones de competitividad y competencia, y con ello una mayor calidad en los servicios y precios más bajos para el consumidor final.
No obstante, refirió el diputado perredista Juan Guerra, de concretarse la iniciativa, la competencia sería entre dos monopolios, para finalmente conformar un duopolio. Este tiene la característica de fijar, también, precios y tarifas a través de una colusión, es decir, ambas partes pactan para seguir manteniendo los precios que ellos determinen para beneficiarse de ese acuerdo, esto es, un juego de gana-gana, refirió el representante del sol azteca.
En ese terreno, su compañero de bancada Alejandro Sánchez Camacho advirtió de los riesgos para el país si llega a concretarse un duopolio. “La Cofeco no ha podido controlar a Telmex y su poder monopólico, difícilmente lo podría hacer con dos, en este caso Telefónica de España, que es una de las empresas internacionales con una vasta historia monopólica, que podría coludirse con Telmex. El caso en mención sería tan pernicioso como el de Televisa y TvAzteca.”