Aflora irritación hacia Larios entre diputados del PAN
En el Palacio Legislativo, entre copas, panistas festejan la reforma fiscal
Eufóricos por la aprobación de la reforma fiscal que dará 114 mil millones de pesos adicionales el próximo año al gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, un selecto grupo de diputados panistas festejó entre copas de coñac, whisky y vino tinto, hasta la madrugada de ayer.
Héctor Larios Córdova, coordinador de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados, brindó con Juan José Rodríguez Prats y el veracruzano Pedro Pulido en el restaurante Los Cristales, del Palacio Legislativo.
Otros legisladores secundaban la algarabía por el reparto de ese dinero, sobre todo el que se obtendrá por el aumento a la gasolina y el diesel.
El ruidoso festejo de los panistas fue uno de los temas que con más interés se comentaron este viernes entre las curules, mientras se desarrollaba la sesión en la que se aprobó la reforma electoral. Sobre todo por el costo de los vinos, que abultó la cuenta, y porque el convite empezó a las 11 de la noche del jueves y terminó ayer poco antes del amanecer.
Con un sentimiento mezclado entre ironía y enojo, diputados del PAN –que solicitaron omitir su nombre– comentaron a este diario haber sido forzados a votar en favor del aumento de 5.5 por ciento a la gasolina y el diesel, “y ahora Larios se va a festejar y nos dejó el costo político, que vamos a pagar en nuestros distritos”.
El jueves por la noche, una vez que el pleno camaral dio entrada, en primera lectura, a la minuta del Senado con la reforma electoral, los panistas encabezados por su coordinador se dirigieron al restaurante conocido como Los Cristales.
Hacia la medianoche los ayudantes del coordinador panista solicitaron al administrador del lugar mantener el servicio hasta que el último legislador se retirara.
El festejo obedecía a la aprobación de la reforma fiscal más importante de los 20 años recientes, que serán etiquetados para combate a la pobreza e infraestructura.
Así que comenzaron a pedir a los meseros whisky Buchanans, botellas de vino tinto Pesquera, cosecha 2004 de Ribiera del Duero, que en la carta del restaurante es el más caro: 625 pesos. También solicitaron coñac y, algunos otros, cerveza.
Entre los brindis –de los cuales participaba con enjundia Juan José Rodríguez Prats, que horas antes había asumido, a nombre del PAN y desde la tribuna, el costo político del gasolinazo– el tiempo transcurrió en medio de la alegría y el júbilo panista.
Hasta poco después de las tres y media de la madrugada se prolongó la celebración. La predilección de los panistas se reflejó en el número de botellas de Pesquera descorchadas. Y entre éstas, las copas de coñac, los vasos de whisky y las cervezas, al final la cuenta fue de casi 18 mil pesos.