Consorcios “deshilacharon” la bandera de la libertad de expresión, dice el ex senador

“Embustera”, la campaña en medios contra la reforma electoral: Corral

Bartlett exige al Congreso una nueva ley de radiodifusión; “ya estamos encarrerados”

Emir Olivares Alonso

La mayoría de los medios electrónicos faltaron a la ética y se instalaron en una “embustera” operación antirreforma electoral con el único fin de defender sus intereses mercantiles, arriesgando incluso la labor profesional de sus “estrellas” de televisión al exponerlos a la “penosa actuación de voceros de sus falacias y mentiras”, aseguró Javier Corral Jurado, ex senador y presidente de la Asociación Mexicana del Derecho a la Información.

Al participar en un seminario sobre ética de los medios informativos organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, el ex legislador subrayó que la libertad de expresión que dijeron defender a ultranza los consorcios ante las modificaciones electorales aprobadas en el Congreso en el transcurso de esta semana ellos mismos la incumplen, debido a que “faltaron a su auditorio al editar y con ello ocultar la dimensión de las reformas”.

Corral –quien se opuso a la aprobación de la ley Televisa durante la legislatura pasada, por lo cual fue “vetado” por el duopolio televisivo– indicó que los medios privados necesitan revisar su compromiso de servicio público, pues debido a que usan el espectro radioeléctrico, propiedad de la nación, no sólo tienen que buscar objetivos mercantiles, sino también sociales; sin embargo, con el espectáculo que los medios masivos ofrecieron por la aprobación de la reforma electoral, demostraron lo contrario, aseveró.

Indicó que para que se muevan dentro de la ética y si quieren adaptarse a la comunicación democrática que el país requiere, los consorcios de medios electrónicos tienen que adquirir un compromiso de imparcialidad, objetividad, independencia, equilibrio en las posiciones y contenidos, pluralidad y respeto a la diversidad.

Señaló que las televisoras comerciales escenificaron un espectáculo con el objetivo de amedrentar a los senadores el pasado martes para impedir la reforma electoral, con la cual se regula, entre otros asuntos, los métodos de adquisición de publicidad por parte de los partidos en esos medios.

“El cañón del canal de las estrellas estuvo en el Senado para tratar de intimidar a los legisladores en cadena nacional; sin embargo, bajaron la transmisión cuando los legisladores esgrimían los argumentos por los cuales se debían hacer las modificaciones a la legislación electoral.”

Corral Jurado subrayó que el argumento que los dueños de las televisoras y sus trabajadores debaten siempre que ven afectados sus intereses económicos es el de la libertad de expresión, la cual consideró “una bandera deshilachada” por la actitud de los propios consorcios.

Aplaudió las reformas aprobadas por el Congreso y las consideró una “emancipación, un acto de reivindicación y de rescate de la dignidad de la clase política”, luego de que por años ésta había cedido a los intereses de los dueños de los medios.

En ese contexto, el ex legislador exhortó a los diputados –quienes ayer aprobaron en lo general las modificaciones– a no dar marcha atrás y lograr que esos cambios se conviertan en ley.

A su vez, Manuel Bartlett, ex senador que también se opuso a la ley Televisa, señaló que fue lamentable la actitud de los medios electrónicos ante el Congreso y la sociedad. Los consorcios “hicieron de su duopolio un arma fatal en las pasadas elecciones”, de ahí la importancia de las reformas aprobadas, abundó.

El también ex secretario de Gobernación indicó que las televisoras no son plurales, pues sólo transmiten “las noticias que les interesan a ellos, y lo demás no existe”.

Expresó que el conductor estelar de los noticiarios de Televisa, Joaquín López Dóriga, “tembló” al exponer sus argumentos ante el Congreso debido a que –contrario a lo que ocurre en su programa– no contaba con el chícharo (audífono), ni con el monitor de guía ni con el resto de las herramientas con las que hace posible su dicción.

Subrayó que tras la reforma electoral, el nuevo reto del Congreso es que la ley de radiodifusión se apruebe en breve, debido a que “el sistema informativo en México es desastroso.

“La plutocracia continuará empoderada y no existirá pluralidad en los informativos de televisión y radio hasta que no exista una normativa que los regule.”

Contra los argumentos esgrimidos por los consorcios de la radiodifusión para descalificar que se prohíba a los partidos la compra de propaganda electoral, Bartlett destacó que en democracias desarrolladas como en Francia, Inglaterra y España está prohibido este tipo de transacciones, y eso no es atentar contra la libertad de expresión.

“Necesitamos una ley de radiodifusión equitativa, que obligue a los consorcios a presentar los hechos de manera equilibrada; ya estamos encarrerados y espero que los legisladores no se detengan aquí”, para convertir en ley esta reforma.