Turnan la minuta a los congresos estatales y a la ALDF para su ratificación

Avalan diputados la reforma electoral

Con 361 votos en favor, 30 en contra y 2 abstenciones se dio fin a la compra de espots en radio y tv

Roberto Garduño y Enrique Méndez

El pleno de la Cámara de Diputados aprobó ayer con 361 votos en favor, 30 en contra y dos abstenciones la minuta del Senado con la reforma electoral que pone fin a la compra de espots en radio y televisión para campañas de los partidos políticos.

De nada sirvió la estrategia de los grupos parlamentarios del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y de Convergencia para alargar la sesión ordinaria realizada ayer en San Lázaro, con objeto de echar abajo precisamente la reforma al artículo 41 de la Constitución, que es el centro de la discordia del duopolio Televisa-Tv Azteca, que a su vez han emprendido una cuestionada campaña en defensa de la libertad de expresión.

Durante seis horas de debate sobre el dictamen que presentaron las comisiones unidas de Gobernación y Puntos Constitucionales, los legisladores federales de PAN, PRD, PRI, PASC y PT argumentaron en favor de la minuta que evitará el dispendio del erario en campañas televisivas y radiofónicas, y además avala la sustitución escalonada de los integrantes del Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE).

Con la conducción atinada de Ruth Zavaleta Salgado, la sesión mantuvo un cauce que a toda costa los diputados del PVEM pretendieron reventar, una y otra vez; primero al proponer una moción suspensiva, que fue rechazada, y después al reservarse todos los artículos del dictamen.

Una vez aprobada la reforma constitucional por mayoría calificada de la Cámara, la presidenta de la mesa directiva, quien fue reconocida con un aplauso por todas las bancadas, turnó la minuta a los 31 congresos de los estados y a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) para que la ratifiquen y adquiera rango constitucional.

“No limita la libertad de expresión”

Sobre el proceso legislativo que condujo a la reforma, el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Raymundo Cárdenas, dijo: “hoy estamos culminando la rebelión de los siervos. El Poder Legislativo asume su papel, y los millones de mexicanos que no tienen dinero propio para pagar campañas en los medios de comunicación (electrónicos) ya podrán ser candidatos. Esta reforma no limita de ningún modo la libertad de expresión. Ésta, según la Suprema Corte de Justicia, está en riesgo por la existencia del duopolio televisivo y por la concentración de los medios de comunicación”.

El panista Diódoro Carrasco Altamirano, presidente de la Comisión de Gobernación, también ponderó la actitud de respeto que el presidente Felipe Calderón Hinojosa ha establecido frente al Congreso de la Unión, porque “a lo que arribamos es a la identificación del mayor obstáculo que enfrenta la democracia mexicana, el poder del dinero y su expresión más negativa, su reflejo más pernicioso en la disputa mercantil por más espacios en los medios de comunicación electrónicos, la televisión y la radio”.

El ex gobernador de Oaxaca expresó desde la tribuna su preocupación por la constante desinformación sembrada entre los ciudadanos, “el uso de la mentira en supuesta defensa de la libertad de expresión, que no puede ocultar el interés agraviado”.

Asimismo, la coordinadora de la diputación del PASC, Marina Arvizu, calificó el contenido de la minuta de los senadores como un hecho que dignificará la política. “La reforma que hoy discutimos empieza a poner fin a esta deformación de la deliberación pública, que es y ha sido la intromisión adinerada de los poderes fácticos en la vida democrática. Restringir y regular la relación de la política con el dinero y con los medios de comunicación es elegir un nuevo modelo de vida pública, muy distinto al que habíamos adoptado irreflexivamente y cuyos límites más grotescos los vivimos en las recientes elecciones”, expresó.

Antes, el diputado Francisco Elizondo, del PVEM, presentó una moción suspensiva para devolver el dictamen de la minuta a comisiones, con el argumento de que la presidencia de la mesa directiva no turnó el documento a la Comisión de Radio y Televisión, que preside Verónica Velasco, también del PVEM.

Sin embargo, el panista Cruz Pérez desmintió esa postura; dijo que Ruth Zavaleta dio turno a la minuta a la Comisión de Radio y Televisión para que opinara sobre el contenido y se le pidió convocar a una reunión el jueves, a las 3 de la tarde, pero Velasco omitió la recomendación y eludió el proceso legislativo.

Aun así, los verdes utilizaron otros artificios legales para tratar de frenar el trabajo legislativo y reclamaron a la mesa directiva que la minuta regresara a las comisiones unidas. No obstante, las evidencias apuntaban a que Verónica Velasco no cumplió con su responsabilidad.

Más adelante, el coordinador de Convergencia, Alejandro Chanona Burguete, rechazó que México gane con la reforma, porque –argumentó– “los políticos tradicionales no deben confundirse: el espectro radioeléctrico no es de nosotros, es del pueblo. Así como ustedes se lo dieron en concesión a las televisoras y radiodifusoras por mucho tiempo, e inclusive llegaron al colmo de tratar de entregarles las concesiones a perpetuidad (con la ley Televisa), hoy se los quitan hipócritamente, argumentando la tiranía del espot y porque el dinero contaminó nuestra impoluta democracia”.

Por parte del PRD, el coordinador Javier González Garza fijó la posición de su partido e ironizó con la actitud asumida por los concesionarios en los días recientes: “hicieron un buen servicio a la democracia, al dejar a un lado la hipocresía con que algunos conductores de sus medios se comportaron durante muchos días. Ellos ya no hablaron de (Luis Carlos) Ugalde ni de la autonomía del IFE. El único tema importante para ellos es el dinero que dejarán de percibir con esta reforma”.

Inclusive, al fragor de la discusión, Gloria Lavara fue hasta la curul de González Garza en el pleno para que PRD, PAN y PRI admitieran que las reservas del Verde y de Convergencia se presentaran cada una por separado, lo que habría llevado el debate hasta altas horas de la noche. El perredista le replicó, entre risas: “sí, sí, yo te firmo lo que quieras”. E ingenuamente, la legisladora le replicó: “sí, pero ante notario”. Héctor Larios y Emilio Gamboa, coordinadores de las fracciones del PAN y del PRI, respectivamente, sonrieron, pero el priísta fue más allá: “no, no; tenemos que terminar temprano. Yo tengo muchos diputados ya rumbo al aeropuerto”.

Pero quien sorprendió a todos fue el dirigente del Partido Verde y coordinador de su bancada, Jorge Emilio González, quien esta vez dejó a un lado su costumbre de pasar lista y retirarse del pleno. Participó activamente, subió a tribuna y dio línea a sus diputados en un esfuerzo desesperado por mantener las prerrogativas que le arrojan innumerables beneficios. Y aun así, no pudo.