Usted está aquí: viernes 14 de septiembre de 2007 Política Luna Ramos: se requería un cambio

El magistrado exige respeto para el Poder Legislativo

Luna Ramos: se requería un cambio

Alonso Urrutia (Enviado)

Villahermosa, Tab., 13 de septiembre. La prohibición a los partidos políticos de contratar publicidad en los medios electrónicos era una reforma necesaria ante el derroche de recursos que existía en las campañas políticas, consideró Alejandro Luna Ramos, magistrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Demandó respeto para el poder constituyente, que es la instancia más importante del país, “pues si no somos respetuosos de ellos, no podemos exigir respeto para nosotros mismos”.

Entrevistado en el marco de la Reunión Nacional de Juzgadores Electorales, se refirió a la injerencia de los poderes fácticos en los procesos electorales y en las discusiones legislativas para aprobar reformas: “La presión fáctica no se detiene ante nada y la tenemos todos los días, en todos los actos. No es una cuestión de enfrentamiento con nadie, pero los poderes fácticos se atienden o no se atienden. Si uno es juzgador debe comprender y atender que los poderes fácticos son como las llamadas a misa: el que quiere va”.

A su vez, el ex presidente del TEPJF Flavio Galván consideró que con las reformas que proscriben también la contratación de promocionales a terceros se establece con mayor precisión que ningún particular –como en su momento hizo el Consejo Coordinador Empresarial en los comicios de 2006– pueda hacer ya alguna contratación de esta naturaleza. Sin embargo, dijo que aún está por verse si esto eliminará totalmente las presiones de algunos sectores en los procesos electorales.

Por su parte, durante la inauguración del acto, la magistrada presidenta del TEPJF, María del Carmen Alanís –una vez que los integrantes de la sala superior sortearon la posible remoción– se refirió a la reforma electoral. Destacó: “Hemos sido respetuosos de las deliberaciones que en otros espacios se están desarrollando en torno a aspectos medulares del Estado mexicano y lo seguiremos siendo”.

En alusión al papel del consejero presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde –con quien tiene viejas rencillas desde la época en que se desempeñó como secretaria ejecutiva del organismo–, advirtió: “Entendemos que la vida republicana requiere que ningún poder público invada competencias que no le correspondan, por lo que no sólo acataremos la voluntad soberana de la representación popular, sino que contribuiremos con entusiasmo a que los cambios a las leyes electorales que se definan se apliquen con eficacia y prontitud”.

 
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