Pasaremos de un ente sujeto al Ejecutivo a uno vulnerable ante los partidos, dice
Ugalde: viola la independencia del IFE la remoción anticipada de consejeros
Se anulará el principio de inamovilidad en aras de negociaciones políticas, advierte
La pretensión de la Cámara de Senadores de remover a seis consejeros electorales antes de que terminen su encargo, “sin causa legal, sienta un mal precedente para la independencia no sólo del Instituto Federal Electoral (IFE) sino de las instituciones del país”, afirmó el consejero presidente del organismo, Luis Carlos Ugalde.
Agregó que “con esta propuesta habremos transitado de un IFE sujeto al Poder Ejecutivo a un IFE vulnerable frente a los partidos políticos”.
En una nueva crítica a la reforma electoral, que coincidió con la comparecencia de representantes de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión ante comisiones del Senado, Ugalde insistió en que si hubo una violación a las leyes electorales o a la Constitución, lo procedente era instrumentar un juicio político. Sin este procedimiento, lo que en realidad se hará es una “vulneración al principio de inamovilidad en aras de negociaciones políticas”.
El consejero presidente del IFE aseguró que esto es una mala señal para las futuras generaciones, pues implica que “las reglas en México siguen siendo sujetas a negociación. Esto no contribuye a la construcción de una cultura de la legalidad. Nos costó muchas décadas construir un IFE de los ciudadanos. Como titular de la institución fundamental del Estado mexicano, tengo profundo respeto por las decisiones del Poder Legislativo, pero es también mi obligación, por convicción democrática y mandato constitucional, cuidar de la independencia del IFE y advertir sobre los riesgos que la amenazan”.
Con el conocimiento de que sólo serán removidos en primera instancia tres integrantes del Consejo General del IFE, esta vez no acudieron con Ugalde los cinco consejeros que lo acompañaron hace una semana, cuando cuestionaron los alcances de la reforma electoral.
Por la mañana, en reunión de consejeros se había planteado que el IFE fijaría postura cuando se aprobara el dictamen de las comisiones unidas del Senado. Sin embargo, por la tarde cambió el escenario y Ugalde salió solo para cuestionar también la designación de un contralor externo que nombrará la Cámara de Diputados.
Aseguró que este esquema podría ser instrumento para presionar “la actuación independiente de los consejeros y demás autoridades del instituto”. Destacó que en el mundo no existe ningún órgano autónomo cuyo contralor sea nombrado desde un poder externo de carácter político.
“En la práctica, cuando los consejeros quieran actuar y sancionar a los partidos, siempre existirá la amenaza latente de que los entes regulados y sancionados puedan, por la vía del contralor y procedimientos administrativos, ejercer presión contra los consejeros.”
Las críticas de Ugalde también se enfocaron contra la imposibilidad de que el IFE tenga defensa jurídica ante la posible intromisión de cualquiera de los poderes de la Unión. Si existe la pretensión de fortalecer al instituto y garantizar su autonomía, el IFE debe ser incluido como sujeto activo para promover controversias constitucionales en el artículo 105 de la Carta Magna, dijo.
En su discurso, Ugalde consideró que la reforma electoral contiene avances innegables –sin mencionar cuáles–, “pero esos avances no pueden justificar violentar la independencia de esta institución”.
Destacó que no puede argumentarse la pérdida de credibilidad en el organismo para proceder a remover a los consejeros, porque el IFE, manifestó, es una de las instituciones que tiene mayor credibilidad entre los ciudadanos.