La actitud del gobierno federal, irresponsable, afirma el PRD-DF
Ebrard: no permitiremos la exclusión del ramo 33
Rechaza el mandatario capitalino reforma fiscal y alza a la gasolina
El titular del Ejecutivo local, Marcelo Ebrard, aseveró que no permitirá que con el argumento de que en el Distrito Federal el ingreso per cápita es muy alto la ciudad de México quede excluida del presupuesto federal en materia de desarrollo social y educación, cuando la mitad de la población subsiste con ingresos muy bajos, e insistió en que su gobierno seguirá “haciendo la diferencia” respecto de los (gobiernos) que son administrados por gerentes como si fueran empresas.
Interrogado acerca de las declaraciones del presidente Felipe Calderón de que si no se aprueba la reforma fiscal se van a afectar varios programas, principalmente los sociales, Ebrard expresó: “para variar eso es lo que cabía esperar” y señaló que por lo que conoce del paquete económico que el gobierno federal entregó a la Cámara de Diputados el sábado pasado, “al DF se le vuelve a excluir de una serie de fondos, situación que estamos analizando, ya que se trata de recursos para educación y desarrollo social”.
Otro punto que interesa a la administración local “es el impacto final de la reforma fiscal, porque como fue enviado y dado a conocer, al DF le costaría más de 3 mil millones de pesos”, añadió el mandatario capitalino luego de la presentación de los proyectos seleccionados del Programa de Mejoramiento Barrial.
En torno a un eventual aumento al precio de la gasolina, indicó que hasta donde tiene conocimiento la propuesta proviene del Ejecutivo federal, con la cual “nosotros no estamos de acuerdo. Por lo pronto, vamos a subrayar que el Gobierno del Distrito Federal no quede excluido de los fondos para educación y desarrollo social”.
En ese contexto, dirigentes del PRD capitalino consideraron que la exclusión del Distrito Federal de tres fondos del ramo 33 en el presupuesto de egresos para 2008 es una actitud irresponsable del gobierno federal, que con ello demuestra que en lugar de buscar una colaboración con la autoridad local, como pregona, lo que pretende es castigar a la ciudad por motivos políticos.
En entrevistas por separado, el presidente y el secretario general del sol azteca, Ricardo Ruiz Suárez y Carlos Reyes Gámiz, respectivamente, coincidieron en afirmar que así como existe un frente de índole política que busca sabotear las acciones del gobierno capitalino, también hay otro de naturaleza financiera con el que se pretende escatimar los recursos y poner contra la pared a la administración local para que se avalen las reformas que propone el titular del Ejecutivo federal.
Ruiz Suárez señaló que la estrategia del gobierno federal es evitar de manera deliberada un mayor desarrollo en la ciudad, lo que afecta no a la administración, sino directamente a los capitalinos, por lo que, aseguró, van a exigir que se corrija esta situación, porque no se trata de una concesión, sino de un derecho que se pretende esquilmar, como en otras ocasiones.
“Es claro que detrás existe una actitud de castigo, que por cierto no les ha funcionado, porque a pesar de que han cerrado la llave de los recursos, la ciudad siempre ha caminado a partir de una política de austeridad y de los buenos resultados en las finanzas locales”, refirió.
Ayer, los integrantes del Comité Ejecutivo del PRD se reunieron con el titular del Ejecutivo local, Marcelo Ebrard, para refrendar su disposición a mantener una coordinación fluida, respetando los ámbitos de competencia legal de cada uno, para hacer frente a los embates de la derecha.
En el encuentro se habló del proyecto de la Torre del Bicentenario, sobre el cual el mandatario local expuso que no se trata de promover a particulares, sino de un plan que forma parte de la creación de seis grandes corredores de inversión privada en la ciudad que buscan detonar la economía local, frente a la asfixia que pretende el gobierno federal.
También fue tema de discusión el acto cívico convocado por la Convención Nacional Democrática en el Zócalo, la noche del 15 de septiembre. Al respecto, Ebrard manifestó, según los asistentes, su respeto hacia este acto y pidió que toda actividad se hiciera en paz.