El Protocolo de Kyoto, rebasado; incluir naciones no desarrolladas, parte del plan
Buscan países nuevos mecanismos para combatir el cambio climático
México participa con compromisos voluntarios, que no impliquen penalizaciones
Ampliar la imagen Activistas de Greenpeace se manifestaron durante el encuentro sobre las repercusiones del calentamiento global, que se llevó a cabo en la ciudad de Viena, Austria Foto: Ap
Viena. Los 35 países desarrollados que mantienen el compromiso de disminuir la generación de gases de efecto invernadero (GEI) –causantes del cambio climático– en 5.2 por ciento, por debajo de los índices reportados en 1990, buscan la participación de China, India y Brasil, naciones menos avanzadas pero que están entre las siete que más contaminan.
México ocupa el lugar número 13 en la lista de los 50 países que más generan GEI. En las negociaciones internacionales mantiene la línea de asumir compromisos voluntarios para reducirlas, que no impliquen ninguna penalización y no afecten el desarrollo.
Así, rumbo a la próxima reunión de la conferencia de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (UNFCCC, por sus siglas en inglés) –que se llevará a cabo en Bali en diciembre próximo–, tanto los países que ratificaron el Protocolo de Kyoto como Estados Unidos, que no lo hizo y ocupa el primer lugar en generación de bióxido de carbono con 23 por ciento del total, se preparan para definir los mecanismos, sobre todo financieros, con que se hará frente al cambio climático.
En el contexto del diálogo que se mantuvo del 27 al 31 de agosto en esta ciudad, el jefe negociador de la delegación de Estados Unidos, Harlan Watson, expresó el interés de su país por el problema, y manifestó que las naciones en desarrollo están haciendo esfuerzos por frenar las emisiones de GEI. Admitió que “existe la opinión” de que dichos países no están haciendo nada, pero ello “es totalmente falso”.
Recordó que el presidente George W. Bush ha señalado que las naciones en desarrollo, como China e India, deben hacer más para combatir el calentamiento global. Esos países participarán en la cumbre sobre cambio climático que se llevará a cabo en Washington los días 27 y 28 de septiembre, a la cual el gobierno estadunidense también convocó a Francia, Alemania, Italia, Gran Bretaña, México, Japón, Canadá, Brasil, Corea del Sur, Rusia, Australia, Indonesia y Sudáfrica, así como a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Watson aseveró que las naciones en desarrollo, encabezadas por China e India, quieren señales de que sus esfuerzos son valorados antes de asistir a las conversaciones en Washington, las cuales, dijo, están dirigidas a trabajar en nuevos objetivos para finales de 2008.
En la carta que Bush envió –el 2 de agosto– a los mandatarios, planteó que dichas conversaciones están enfocadas a trabajar sobre los límites de emisiones más allá de 2012. Además, que consideren una meta global a largo plazo y hagan énfasis en cómo las grandes economías pueden, con apoyo del sector privado, acelerar el desarrollo de tecnologías limpias, con el fin de reducir la generación de GEI.
Después de esa reunión, en noviembre será presentado el cuarto y último reporte del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés). El año terminará con el encuentro en Bali, donde se espera que habrá acuerdos sobre la necesidad de impulsar el nuevo régimen para después de 2012, cuando vencerá el Protocolo de Kyoto, el cual deberá dar una respuesta de largo plazo a la problemática, declaró, por su parte, Yvo de Boer, secretario ejecutivo de la UNFCCC.
Sostuvo que la información disponible revela que la “adaptación” al cambio climático es inevitable y que los países en desarrollo son los más vulnerables, por lo cual las políticas al respecto deben ser establecidas lo más pronto posible. Las naciones deben tomar decisiones por los efectos del fenómeno, aseveró.
Las expectativas en torno de la reunión en Bali son que se deberá señalar que las acciones contra el cambio climático son prioritarias y la participación del sector privado deberá ser a largo plazo y con estrategias definidas. De Boer agregó que en los objetivos para reducir las emisiones se debe considerar la pérdida de bosques y dar prioridad a la transferencia de tecnologías. Destacó que entre 2009 y 2010 habrá una fuerte negociación para que en 2012 haya claridad sobre el futuro régimen, el cual deberá responder a lo que establezca el próximo reporte del IPCC, el cual será la suma de los tres que han sido presentados este año.
En la reunión preparatoria de la UNFCCC en Viena se realizó la cuarta sesión del grupo Ad Hoc, el cual evalúa los compromisos adicionales de países desarrollados. También se llevó a cabo el cuarto encuentro del taller encargado de identificar las oportunidades de cooperación a largo plazo y de ampliar la cooperación. Para el 24 de septiembre está prevista una reunión de alto nivel, convocada por la Secretaría General de la ONU.
Perspectivas para México
El Protocolo de Kyoto es insuficiente para avanzar en la reducción de emisiones de GEI, por lo que en el contexto de las negociaciones internacionales destaca la necesidad de complementar la arquitectura institucional de lo que actualmente existe, consideró Carlos Muñoz, director general adjunto de Cooperación Internacional de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) e integrante de la delegación mexicana que participó en el encuentro.
Señaló que se deben explorar opciones y establecer mecanismos que permitan, entre la reunión de Bali y los próximos dos o tres años, avanzar en la definición de medidas adicionales. Indicó: “México considera que algunos de los compromisos considerados en el Protocolo de Kyoto deben ser reforzados”.
Para países como México, continuó, deberán ser acciones voluntarias, que no comprometan el desarrollo nacional y no sean penalizables. Empero, deben fijarse metas en un esquema de incentivos positivos y que, por ejemplo, programas sectoriales pudan recibir financiamiento externo.
Por su parte, Andrés Flores, director de Investigación en Cambio Climático del Instituto Nacional de Ecología, sostuvo que se busca el reconocimiento a los distintos esfuerzos nacionales para que sean susceptibles de incorporarse como iniciativas acreditables y puedan dar a México fondos del exterior.
Indicó que hay iniciativas que actualmente no pueden ser incluidas en el mecanismo de desarrollo limpio (MDL). Si se logra tener un sistema aceptado internacionalmente para que ese tipo de propuestas sean consideradas, apuntó, será un avance. Se trataría de un MDL programático que ya está en proceso, explicó.
En el diálogo sobre la cooperación para hacer frente al cambio climático, México considera que como país en desarrollo, que tiene emisiones per cápita por debajo de la media mundial, realiza acciones significativas para contribuir con los objetivos de la UNFCCC. Mantiene su disposición de discutir metas voluntarias de limitación o reducción de las emisiones de GEI. Además, que éstas no impliquen ningún tipo de compromiso jurídicamente vinculante.
En relación con las negociaciones del grupo Ad Hoc, el gobierno mexicano apoya la permanencia del protocolo y sus mecanismos, sobre todo la promoción del MDL para que se agilice su funcionamiento. Considera apoyar compromisos a más largo plazo, que den certidumbre a las inversiones en tecnologías limpias y el mercado de carbono.