Destaca en foro carencias y fallas en reclusorios
Obsoleto, el modelo penitenciario actual, dice funcionario capitalino
Con el actual modelo penitenciario más que dar un servicio a la sociedad, “pareciera que estamos formando nuevos delincuentes”, por lo que es necesario cambiarlo, afirmó el subsecretario de Gobierno capitalino, Juan José García Ochoa.
Al inaugurar el foro El sistema penitenciario actual y alternativas de cambio, el funcionario señaló que la falta de infraestructura y la capacidad adecuada han obstaculizado la readaptación social y provocado que los reclusorios se conviertan en centros de hacinamiento, donde “se acentúa el rencor social y los vínculos criminales”.
Ante esta situación, dijo, se trabaja en diversas medidas para evitar la sobrepoblación en los penales capitalinos y se contemplan propuestas de penas alternativas, como prisión domiciliaria, encarcelamiento parcial y trabajo comunitario a jóvenes primodelincuentes de entre 18 y 20 años.
En entrevista, García Ochoa explicó que se trata de apoyar a jóvenes de muy baja peligrosidad, para que puedan purgar sus penas “los fines de semana, ir a prisión sólo en las noches o realizar actividades comunitarias durante el día”.
Dichas propuestas, especificó, serán discutidas durante el foro, en el cual participan especialista en el tema, con el propósito de conformar una iniciativa que se presentará a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal para su aprobación.
Antes, durante su discurso, el funcionario indicó que con la infraestructura del modelo penitenciario de la capital cubre solamente las necesidades de dos terceras partes de la totalidad de la población penitenciaria.
Para disminuir el hacinamiento, la administración local ha reubicado a unos 2 mil internos “en el interior del mismo sistema penitenciario”, con el propósito de equilibrar el número de internos por dormitorio.
Aseguró que el próximo año se iniciará la construcción del nuevo penal de alta seguridad con capacidad para entre 800 y mil reos peligrosos, ya que no es conveniente que éstos “convivan con los demás presos”. Asimismo, se trabaja para fortalecer el trabajo penitenciario, pues sólo 7 por ciento de los reos participa en el mismo.
De su lado, la segunda visitadora de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Patricia Colchero Aragonés, indicó que es necesario implementar el servicio civil de carrera para los custodios de los reclusorios, así como apoyo sicológico, pues la deficiente preparación que tienen y el estrés al que están expuestos, tiene como consecuencia la violencia hacia los internos.
En tanto, el gobierno del Distrito Federal solicitó formalmente a la Procuraduría General de la República no enviar a un reclusorio de esta capital al operador del cártel del Golfo, Juan Carlos de la Cruz Reyna, El JC, capturado el 29 de agosto pasado durante un operativo implementado por efectivos militares en un restaurante de Polanco.