Fue “un robo” la privatización de la Compañía Valle del Río Dulce, señalan los grupos
Buscan cientos de organizaciones renacionalizar minera brasileña
Realizan plebiscito sobre el tema, que acabará el domingo; esperan 10 millones de participantes
El Movimiento de los Sin Tierra y Vía Campesina, entre los convocantes a la consulta popular
Río de Janeiro, 3 de septiembre. Más de 200 organizaciones brasileñas realizan una consulta para que los electores digan si desean que se revoque la privatización de la Companhia Vale do Rio Doce (Compañía Valle del Río Dulce, CVRD, o “la Vale”, como es conocida en el país), a 10 años de su venta.
En el plebiscito, iniciado el sábado pasado y a concluir el próximo domingo, participan el Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), la Central Única de Trabajadores (CUT) y la organización Vía Campesina. Su intención, según Joao Pedro Stédile, dirigente del MST, es llevar a cabo un “ejercicio educativo de soberanía popular” y generar conciencia en torno de una privatización que consideran “un robo”.
Creada en 1942, durante el gobierno de Getulio Vargas, y vendida en 1997, la CVRD es la segunda compañía minera del mundo por su valor comercial, cifrado en unos cien mil millones de dólares; es la mayor productora de hierro del mundo y está presente en los cinco continentes.
Según su página de Internet, sólo en Brasil la Vale controla seis terminales portuarias, por las que pasa 30 por ciento de lo que entra o sale por el mar; posee casi 10 mil kilómetros de vías férreas y transporta 16 por ciento de lo que circula sobre rieles en el país. Además produce gran parte de la energía que consume; es una de las principales alumineras de América Latina y es dueña de la compañía Inco, una de las principales mineras de Canadá.
Irregularidades
De acuerdo con los organizadores de la consulta popular, la privatización de la CVRD, llevada a cabo por el gobierno del socialdemócrata Fernando Henrique Cardoso, estuvo plagada de irregularidades, entre las cuales el MST cita la desvalorización nominal de la compañía, lo que llevó a venderla a un precio 10 veces menor al real.
Lo anterior pudo ocurrir gracias a que “la empresa que valuó la compañía para el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social fue la misma que asesoró al banco Bradesco”, uno de los actuales propietarios, afirma Stédile.
“Eso quiere decir que los valuadores asesoraron tanto al vendedor como al comprador”, concluyó el dirigente.
Éste y otros problemas jurídicos motivaron un centenar de denuncias contra la transacción, de las que 69 siguen en curso.
Una de las sentencias sobre estas querellas, en proceso de apelación, señaló en segunda instancia, en diciembre de 2005, que hubo fraude en la venta, por lo que sería nula. En ese entonces, el fallo fue recibido con júbilo por los opositores a la privatización, aunque reconocieron que “lo que sigue durará años”.
Por lo pronto, el MST y sus aliados en la campaña “¡La Vale es nuestra!” piensan llamar a la gente a que se pronuncie sobre el tema. Se espera que acudan a votar unos 10 millones de personas en esta consulta.
A los votantes se entrega una papeleta que explica que “en 1997, la Compañía Valle del Río Dulce, patrimonio construido por el pueblo brasileño, fue privatizada de forma fraudulenta, una acción que el gobierno y el poder judicial pueden anular”. También se les plantea la pregunta “¿La Vale debe continuar en las manos del capital privado? Sí o no”.
Los resultados serán entregados el 25 de septiembre a los representantes de los tres poderes del Estado, y se espera que la consulta sirva para presionarlos y que la CVRD vuelva a manos públicas.
La tarea se antoja difícil por la complicada distribución de su propiedad y por lo poderosos que son muchos de sus dueños. Desde septiembre de 2003, el enorme consorcio japonés Mitsui posee 15 por ciento de las acciones de Valepar, el conglomerado de accionistas que controla más de la mitad de los votos de capital de la CVRD.
Además la cuarta parte de capital ordinario de la Vale está en manos de extranjeros, sólo 7 por ciento en manos de brasileños privados y el Estado controla apenas otro 7 por ciento. De su capital total, casi dos terceras partes están a merced de las bolsas de valores, en Nueva York y Brasil.
Los organizadores de la campaña para renacionalizar la em-presa, sin embargo, insisten en que es posible lograrlo. Como reza el lema del evento Grito de los Excluidos, vinculado a la campaña, están convencidos de que “Esto no Vale”.
Operativo en favela; 7 muertos
En otro asunto, la policía brasileña mató este lunes a siete sospechosos de tráfico de drogas en un operativo en una favela de Río de Janeiro, en el más sangriento choque en la ciudad desde junio.
La policía dijo que 100 oficiales que ingresaron a la favela Fumacé, en la zona oeste de la ciudad, para buscar armas y realizar arrestos, fueron recibidos con disparos de armas de fuego y que los sospechosos murieron en el tiroteo, en el que no hubo heridos en las fuerzas de seguridad.
La policía de Río es conocida por sus duras tácticas contra las bandas de traficantes que dominan muchas de las favelas de la turística ciudad.