La elección del domingo, oportunidad para arrebatar al PAN el control del Congreso, dice
Fidel Herrera pide diferir la transmisión del mensaje de Calderón en Veracruz
Jalapa, Ver. 31 de agosto. “Te pediría que el mensaje del señor Presidente se transmita en Veracruz después de las seis de la tarde”, suelta el gobernador Fidel Herrera Beltrán, después de varias frases de cortesía y algunas bromas para quien lo escucha del otro lado del auricular: César Nava, secretario particular de Felipe Calderón.
Y es que al brazo derecho del equipo calderonista le interesa confirmar la presencia del mandatario veracruzano, no tanto en la ceremonia de la entrega del informe –este sábado en la Cámara de Diputados–, sino en la convocatoria dominical en Palacio Nacional, cuando aquí, en Veracruz, arranca la jornada electoral para renovar ayuntamientos y Congreso.
La llamada de Nava pone en evidencia la cortesía con los gobernadores priístas, que se prestan a incluir, si es necesario, hasta facilidades de logística, proporcionadas por el gobierno federal. Está claro que en Los Pinos tienen especial interés en que ningún “invitado especial” se pierda el mensaje de Calderón, aun cuando no acudan a la ceremonia protocolaria –del primer informe– en el recinto legislativo de San Lázaro.
Quién sabe si desde la Presidencia de la República puedan o quieran complacer tal solicitud (diferir la transmisión en territorio jarocho del discurso presidencial), pero en el toma y daca, el gobernador priísta desliza que si no se bloquea la señal él saldrá a emitir su propio mensaje a los veracruzanos.
Luego, en la negociación, concede que en atención al telefonema, este domingo deberá ajustar su agenda: votará temprano en el puerto de Veracruz; luego, volará a la ciudad de México y regresará de inmediato a vigilar el curso de la jornada electoral.
La de este domingo, reconoce Herrera Beltrán a La Jornada, será una suerte de referéndum de su gestión como gobernador, pero sobre todo, la oportunidad de tomar el control del Congreso local, actualmente bajo la batuta del PAN.
También da su versión acerca de las acciones del gobierno federal (como el reciente incidente por la visita “inesperada” de la secretaria de Desarrollo Social, Beatriz Zavala) y de la puesta en marcha de un operativo en favor de la coalición Fidelidad por Veracruz, con base en derroche recursos públicos, materiales y humanos, según denuncia la oposición.
Pero el gobernador, cuatro veces ex legislador federal, se muestra tranquilo, rechaza todas las versiones del panismo y, para matizar su influencia, hasta parafrasea al ex presidente Luis Echeverría: “¡Yo no controlo ni a mis nietos!”.
En la ciudad de México, la diputada federal priísta María del Carmen Pinete Vargas solicitó al secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, que con motivo del mensaje de Calderón a la nación, “respetuosamente se hagan los procedimientos necesarios para que la señal de radio y televisión de dicho mensaje sea bloqueada el tiempo en que transcurre la elección en el estado de Veracruz y su difusión se difiera a las 6 de la tarde”.
La Comisión Permanente del Congreso de la Unión hizo también un exhorto al presidente Felipe Calderón, al gobernador Herrera Beltrán y a los gobiernos municipales de esta entidad para que se sujeten (en los comicios a realizarse este domingo) a los principios de equidad y neutralidad en el proceso electoral estatal.
El dictamen de dicho punto de acuerdo fue presentado al pleno por la Primera Comisión de la Permanente, en el que se refiere que en días pasados la dirigencia nacional y estatal del PRI demandaron al gobierno federal que ordenara a los funcionarios del gabinete no intervenir en el proceso electoral, múltiples resultan las ingerencias de distintos funcionarios federales a lo largo de dicho proceso.
En sus consideraciones, la comisión destaca que es de todos sabido que en los procesos electorales locales “la Federación ha jugado un papel importante de persuasión con los electores, en virtud de que, aprovechándose de los planes y programas de interés social, buscan el convencimiento del voto, alterando con ello la libertad y objetividad con que debe emitirse el mismo”.