Ramírez Acuña niega que se politice el apoyo a los afectados por el huracán Dean
El gobierno federal excluye a Ivonne Ortega de un recorrido por Yucatán
Sólo han sido declarados en desastre siete de los 59 municipios solicitados por la priísta
Ampliar la imagen El helicóptero que transportó a los secretarios de Gobernación, Francisco Javier Ramírez Acuña, y de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Alberto Cárdenas Jiménez, aterriza en el municipio de Tzucacab, afectado por el paso del huracán Dean Foto: Yazmín Ortega
Tzucacab, Yuc., 28 de agosto. Sin la gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, el secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, y el de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Alberto Cárdenas Jiménez, visitaron tres de los municipios afectados por el huracán Dean, que tocó territorio nacional el martes pasado.
Ramírez Acuña negó que el gobierno federal esté politizando el apoyo y llamó a los partidos políticos a evitar el uso proselitista de recursos federales.
El gobierno encabezado por la priísta Ortega solicitó que 57 municipios de Yucatán fueran declarados en desastre a fin de que reciban recursos para reconstrucción, pero la Comisión Nacional del Agua (Conagua) sólo ha autorizado hasta la fecha los dictámenes técnicos correspondientes a siete ayuntamientos.
Los funcionarios federales insistieron en que no se están politizando los recursos; sin embargo, en la rápida gira (de 10 a 15 minutos por municipio), los secretarios no dejaron de recordar a los presidentes municipales (de extracción priísta) y a los pobladores que encontraban que estaban ahí por instrucciones del presidente Felipe Calderón, quien ordenó entregar en forma expedita los apoyos.
El más enfático fue Cárdenas Jiménez, quien de esa forma respondía a los presidentes municipales que exigían no valorar los daños desde un escritorio, sino en recorridos. Tampoco desaprovechó la ocasión para presentarse ante autoridades locales y ciudadanos como personero del Ejecutivo federal: “Haga de cuenta que aquí está el presidente Calderón (…) ¡Ya quedamos con el presidente Calderón en que les vamos a mandar apoyo para el campo y azúcar para sus abejas!”.
Ramírez Acuña escuchó reclamos de los alcaldes de Oxkutzcab, Tzucacab y Peto (en la zona sur de esta entidad) para que se realice una evaluación puntual de los daños, principalmente en el sector agrícola. “Hay reglas claras (del Fondo de Desastres Naturales, Fonden); no hay cerrazón de la Conagua ni intención de politizar los apoyos”, dijo.
Justificó la ausencia de la mandataria estatal: “Entiendo que la gobernadora haya tenido algunos otros compromisos. De hecho, desde ayer en la tarde la he buscado, pero no he podido comunicarme con ella porque me dicen que anda en una zona donde no es posible establecer el enlace”, dijo.
Insistió en que las reglas para atender emergencias se fijaron el año pasado “y por eso, repito, no hay que politizar. Yo no estoy politizando ni vamos a entrar en politizaciones, ¿eh? ¡Que quede claro!” Incluso garantizó que los recursos ejercidos son totalmente auditables.
Según explicó el subdirector general técnico de la Conagua, Felipe Arreguín, las decisiones de este organismo obedecen estrictamente a aspectos técnicos y a las mediciones de viento, lluvia, tormentas eléctricas y oleajes; de ahí que –dijo– sólo siete municipios calificaron para ser declarados zonas de desastre. Por ello, si el gobierno estatal insiste se realizarán evaluaciones particulares y, en todo caso, se recurrirá a programas regulares.
“Los instrumentos que miden la velocidad del viento no saben de partidos políticos”, expresó Arreguín.
El titular de la Sagarpa, Alberto Cárdenas, dijo que se han canalizado cerca de 13 millones de pesos para atender a productores de maíz, ganaderos y apicultores, principalmente, y aseguró que esta contingencia no derivará en escasez de alimentos ni en aumento de precios de los granos.
De acuerdo con un cálculos oficiales preliminares, tras el paso del huracán Dean el gobierno federal ha canalizado 164 millones de pesos en insumos para enfrentar daños.
Protección Civil ha declarado en situación de emergencia a medio millar de municipios de 10 entidades y se encuentra a la espera de los dictámenes de la Conagua para calificar la procedencia o no de las declaratorias de desastre.
En Yucatán se canalizaron insumos por posible afectación a 106 ayuntamientos, pero el gobierno de Ivonne Ortega solicitó la declaración de desastre para 59.
Pide la gobernadora apoyo a PRI y CNC
Por la noche –cuando la gobernadora seguía en capital del país en viaje de trabajo–, la administración estatal emitió un comunicado en el cual señala que “no quiere interpretar que detrás de estas determinaciones y acciones haya intereses ajenos a la búsqueda de las mejores soluciones a las necesidades urgentes de la población afectada” por el meteoro.
“Es necesario recordar que la administración estatal refrenda su interés en que se realice una verificación de campo exhaustiva para determinar con precisión los daños ocasionados por el meteoro”, destaca el boletín oficial.
“Las primeras evaluaciones realizadas por los funcionarios visitantes, a las que se deberán sumar otras más, son bienvenidas. El gobierno de Yucatán está comprometido con sus habitantes, especialmente con quienes resintieron afectaciones en sus propiedades o bienes, y no hará distingos en su afán de apoyarlos.
“A pesar de lo anterior, es de observarse que, de haberse hecho del conocimiento de las autoridades estatales, con la debida anticipación, la visita de altos funcionarios de la Federación para los fines expresados, ambos órdenes de gobierno habrían obtenido un mejor resultado para los yucatecos. De otro modo, se generan suspicacias y todo tipo de interpretaciones”, señala el documento.
El Ejecutivo estatal reitera “su disposición a trabajar coordinadamente con el gobierno federal, siempre que se ejerza puntualmente el pacto federal y se respete la soberanía estatal”, finaliza el texto.
Previamente, la gobernadora de Yucatán pidió a los legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y a los cenecistas que respalden su demanda al gobierno federal para que reconozca los daños que dejó el huracán Dean en 59 municipios y no sólo en siete, como decretó la Conagua.
“¿Cómo les voy a decir a los campesinos que no tendrán dinero para sostener a sus familias durante los siguientes seis meses, después de que perdieron sus cosechas y animales? ¡Ayúdenme a elevar la voz para que no les den la espalda a los hombres del campo!”, pidió a las cerca de 5 mil personas reunidas en la clausura del Congreso Nacional de la Confederación Nacional Campesina (CNC).
Allí y después en entrevista, aseguró que no “bajará la guardia” en su exigencia de que se acepte la declaratoria de desastre para el campo, y aseguró que la decisión de no reconocer los daños en los 59 municipios se debió a que el director de la Conagua, José Luis Luegue Tamargo, “tomó decisiones desde el escritorio. En Yucatán no lo hemos visto. Sólo el día del huracán pisó el aeropuerto y después se fue a Campeche. Le pedí que no definiera sin sensibilidad y que fuera a verificar en campo los daños”, puntualizó.
Comentó que en esos municipios se perdió toda la producción de maíz, mamey, aguacate y papaya maradol, que ya estaba lista para cosecharse; también hay 6 mil casas afectadas “y la gente no tiene dónde vivir. Hemos estado haciendo un esfuerzo para repartir láminas de cartón. Esas familias merecen vivir de manera más digna, pero no hemos encontrado respaldo”.
Aseguró que no desistirá de su petición de recursos suficientes para respaldar a las familias que tuvieron pérdidas por el huracán Dean. “Si no recibo el respaldo del gobierno federal buscaré cómo sacar la casta con los yucatecos; recurriré a la iniciativa privada”.
Comentó que la próxima semana tendrá el monto de los daños, pero parte de la ayuda será para emprender un programa de prevención, para que la gente tenga casas más seguras y tenga albergues para atender mejor a las familias.