Legisladores impulsarán un nuevo formato para el Informe de gobierno, anuncia senador
Reviven en el Congreso proyecto para atenuar el presidencialismo
Otro planteamiento es reducir el periodo entre la elección y la toma de posesión del Ejecutivo
Las fuerzas políticas en el Congreso de la Unión impulsarán un nuevo régimen de Estado y de gobierno, en el cual se incluye modificar el formato del Informe y reducir el periodo entre la elección y la toma de posesión del presidente de la República.
En el contexto de la reforma del Estado, existe ya un documento base que resume las propuestas de partidos y ciudadanos en torno al tema.
La intención de los grupos parlamentarios es llegar lo antes posible a consensos, para “que no se repita un escenario similar al de este primero de septiembre”, afirmó el senador petista Alejandro González Yáñez.
Integrante de la subcomisión redactora de la Comisión Ejecutiva de Negociación y Construcción de Acuerdos del Congreso, González Yáñez expresó que la modificación del formato del Informe presidencial es un asunto que debe abordarse de inmediato.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) planteó modernizar el mecanismo mediante el cual el Ejecutivo federal rinde cuentas al Congreso, manteniendo la disposición contenida en el artículo 69 constitucional que sólo obliga al presidente a entregar por escrito cada año un documento con los datos sobre el estado general que guarda la administración pública, pero con el agregado de que deberá incluir los informes parciales que cada mes un jefe de gabinete tendrá que hacer llegar al Legislativo.
“De esa forma, el mecanismo de rendición de cuentas se realizará de una manera más cotidiana, con diálogo entre los poderes, ya que el Congreso podrá formular observaciones.”
En su propuesta, el PRI señala que “deberá dejarse abierta la posibilidad de que, de así convenirlo con el Legislativo, el presidente pueda comparecer personalmente a rendir su Informe”.
En el documento base se incluyó ese planteamiento y otros que aluden a instaurar un sistema que propicie mayorías legislativas y de gobierno estables.
Fortalecer los tres poderes, meta
Existen dos propuestas: instituir un gobierno en el que se asegure mayoría parlamentaria al presidente de la República –el cual tendría un jefe de gabinete– y en segundo lugar un sistema semipresidencial, en el que se dividan las funciones de Estado y de administración.
En este último escenario, el presidente tendría las funciones de jefe de Estado, mientras otra persona encabezaría un gobierno de mayoría parlamentaria.
Las propuestas presentadas por sociedad y partidos para la reforma del Estado buscan fortalecer a los tres poderes.
En el caso del presidente, el proyecto es modificar el formato de su Informe y acortar el periodo entre la elección y la toma de posesión. Se plantea que el mandatario pueda viajar al extranjero –en caso de ausencias cortas– sin necesidad de que el Congreso lo autorice, pero se regula su derecho de vetar leyes.
Por lo que toca al Legislativo, las propuestas van encaminadas a reducir el número de integrantes de ambas cámaras, a permitir la relección de senadores y diputados, a ampliar los periodos ordinarios de sesiones, a fortalecer las comisiones de trabajo y a regular el cabildeo en el Congreso.
En ese documento –que servirá de base para la discusión y la elaboración de iniciativas de ley– se precisa que el diagnóstico de partidos políticos, académicos, especialistas y otros ciudadanos que participaron en los foros de consulta es coincidente: “las instituciones del viejo régimen fueron diseñadas en torno a lógicas que ya no operan, por lo que resulta indispensable adecuarlas a las nuevas realidades que vive el país”.
La intención es llevar a cabo “modificaciones institucionales que incentiven la gobernabilidad democrática, es decir, reformas que incentiven tanto la participación ciudadana como la conformación de acuerdos entre partidos, la corresponsabilidad entre poderes y el correcto desempeño de la actividad política”.