El INM debe recibir a quienes se presenten en forma voluntaria para ser repatriados
La CNDH demanda "espacios dignos" para centroamericanos aprehendidos
Con el fin de revertir la presencia masiva de migrantes indocumentados y su larga permanencia en poblaciones como Arriaga, Chiapas; Tenosique, Tabasco, e Ixtepec, Oaxaca -debido a la suspensión de operaciones de los trenes de carga en que suelen viajar-, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) manifestó ayer que el Instituto Nacional de Migración (INM) "debe recibir a quienes voluntariamente se presenten para ser repatriados; se les debe albergar en espacios dignos y, si no se cuenta con ellos, habilitarlos, para tenerlos ahí hasta su traslado".
El quinto visitador de la CNDH, Mauricio Farah Gebara, manifestó que cifras de albergues religiosos y de organizaciones defensoras de los derechos humanos señalan que hay 7 mil migrantes varados en esas zonas, que siguen su camino a pie, ante la falta de tren, porque están decididos a llegar a la frontera norte para cruzar a Estados Unidos.
La CNDH emitió ayer un comunicado en el que solicita al INM que, "si no tiene el cupo suficiente en las estaciones migratorias, se habiliten espacios para atender a los migrantes que voluntariamente acudan ante la autoridad y manifiesten querer su repatriación; se les debe aceptar y, si no hay espacio, deben habilitarse lugares hasta en tanto se les regrese a su lugar de origen, y su retorno debe agilizarse y efectuarse con pleno respeto a sus derechos humanos".
La CNDH inició un expediente de queja con motivo de la denuncia de dos mujeres migrantes, una hondureña y una salvadoreña, quienes manifestaron que al momento de su detención en Tenosique, Tabasco, "agentes federales de Migración quemaron sus mochilas, así como el campamento donde se encontraba el grupo de aproximadamente 30 migrantes con los cuales viajaban".
Farah añadió que la CNDH mantiene la presencia de ocho visitadores en el sur del país, quienes supervisan lo que ocurre en la zona para prevenir y, en su caso, documentar violaciones a los derechos humanos.
El visitador manifestó que "hay miles de migrantes; muchos de ellos siguen su camino a pie para llegar a Coatzacoalcos y de ahí continuar hasta la frontera norte. Se encuentra de todo: niños, mujeres, jóvenes, hombres, adultos mayores, es una situación difícil la que padecen. Por ello se emitió el llamado a Migración para que con el objeto de evitar violaciones a sus derechos humanos, los indocumentados sean aceptados y trasladados a sus lugares".
La CNDH sostiene que la suspensión de operaciones de los trenes de carga hace más vulnerables a los migrantes a agresiones, asaltos, abusos de autoridad y contagio de enfermedades, entre otros riesgos.