Mexicana refugiada en iglesia de Chicago saldrá a protestar
Chicago, 15 de agosto. Una inmigrante indocumentada mexicana, que se transformó en portavoz de las familias que enfrentan la deportación de Estados Unidos al refugiarse en una iglesia de Chicago hace un año, señaló este miércoles que dejará ese lugar para llevar su lucha a Washington.
Elvira Arellano, de 32 años, ha permanecido dentro de la Iglesia Unida Metodista de Adalberto un año, invocando la antigua protección medieval que da un santuario.
Con su hijo Saúl, de ocho años, a su lado, Arellano expresó que planea dejar la seguridad de la iglesia para participar en una marcha en pro de la inmigración, prevista para realizarse el 12 de septiembre, cuyo objetivo es revivir propuestas que están en el Congreso estadunidense para cambiar las leyes en la materia.
"Iré a Washington. Iré a rezar y a mantenerme firme frente al Congreso", indicó Arellano a los reporteros.
Arellano ha dicho que actúa en nombre de su hijo, quien no quiere vivir en México, un país que él sólo ha conocido el año pasado cuando viajó al Distrito Federal a cabildear para que el gobierno mexicano ayude a su madre.
Las autoridades de inmigración no han intentado arrestarla, aunque la iglesia no significa ninguna barrera legal para ingresar. En un comunicado, el servicio de Inmigración y Aduanas declaró que "tiene la autoridad para arrestar a extranjeros indocumentados en todos los lugares".