Inauguran obras de Cantoni-Crescenti y D’Agostino en Laboratorio Arte Alameda
Despliegan el infinito en una instalación
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Infinito al cubo, instalación de Rejane Cantoni y Leonardo Crescenti que hoy se inaugura a las 19 horas en el espacio de Doctor Mora 7, Centro Histórico
Foto: Cortesía Laboratorio Arte Alameda
El Laboratorio Arte Alameda, espacio dedicado a proyectos multidisciplinarios, alberga desde este martes y hasta el 30 de septiembre las instalaciones Entre el cielo y la tierra: Mx, de Peter D’Agostino, e Infinito al cubo, de Rejane Cantoni y Leonardo Crescenti.
La primera propuesta es una selección de instalaciones sobre paseos realizados por D’ Agostino, entre 1973 y 2007, en espacios naturales y geométricos en tiempo real. La obra se desarrolla en forma de videoinstalación, videoperformance, actos de telecomunicación y producciones transmitidas.
El artista explicó que su creación está integrada por 10 trabajos sobre la ciudad de México y sus alrededores, inspirados en el ensayo Crítica de la pirámide, de Octavio Paz, texto que lo acompañó en su primer viaje al país en 1975.
En los videos, mediante caminatas, el autor presenta ambientes naturales, culturales y virtuales que ha reunido durante las pasadas tres décadas y que son la base de sus proyectos de caminatas a lo largo del mundo.
Como parte de las actividades de la exposición, Peter D’Agostino ofrecerá al público una visita guiada y una sesión de preguntas sobre su obra mañana miércoles a las 19 horas, en ese recinto.
La segunda exhibición consiste en una especie de cámara óptica, que permitirá al espectador vivir una experiencia de dimensionalidad mediante el movimiento delicado de las paredes de espejo de acrílico de un cubo.
La artista e investigadora de sistemas de información, Rejane Cantoni, y Leonardo Crescenti, director de fotografía en cine, crearon una instalación en forma de cubo que utiliza espejos como ventanas para desplegar el infinito. Se trata de un caleidoscopio de luz, color y movimiento que cobra vida cuando una persona utiliza la fuerza de su cuerpo para mover el cubo de espejos que permanece suspendido en la sala.
Cantoni señaló que los espejos por fuera reflejan el espacio a su alrededor, y los que están dentro del cubo provocan reflexiones infinitas en todas direcciones. “Se ve el infinito y uno se mira a sí mismo en medio de horizontes perdidos”.
La instalación es un cubo de dimensiones de 3x3x3 metros, totalmente forrado de espejos por fuera y por dentro, elevado 25 centímetros del suelo, apoyado en una cruceta en el centro de su base y en un resorte en cada lado que le permite moverse.
A partir de conceptos como el infinito y la potencia en las que trabajan las ciencias exactas, el experimento Infinito al cubo evoca una cámara oscura, en teatro de sombras, un cine expandido a la realidad circundante que se exhibe al mismo tiempo que es producido.
Las instalaciones se inauguran hoy las 20 horas en el Laboratorio Arte Alameda (Doctor Mora 7, Centro Histórico).
El 16 de agosto, de 10 a 14 horas, Cantoni y Crescenti impartirán un seminario en el Centro Multimedia del Centro Nacional de las Artes (Churubusco, esquina Tlalpan) y el mismo día, a las 19 horas, darán una charla en el recinto del Centro Histórico.