Niega planes de restablecer el reclutamiento obligatorio
Emprende EU ofensiva en Irak contra miembros de Al Qaeda y milicias chiítas
Bagdad, 13 de agosto. El ejército estadunidense emprendió hoy una operación denominada Golpe de Fantasma con la que pretende neutralizar a presuntos militantes de Al Qaeda en Irak y a milicias chiítas, antes de que esas organizaciones armadas lancen una ofensiva "espectacular" que influya en la opinión pública estadunidense.
La movilización de las fuerzas estadunidenses se inicia un mes antes de que el Congreso discuta el presupuesto para las guerras de Irak y Afganistán, que los demócratas han tratado infructuosamente este año de condicionar al establecimiento de un cronograma de retorno de las tropas que desde marzo de 2003 ocupan este país asiático.
"Se trata de maniobras simultáneas en todo el territorio de Irak, centradas en la búsqueda de terroristas de Al Qaeda y de extremistas apoyados por Irán", dijeron mandos del ejército al dar a conocer los objetivos de la operación, que involucra a la mayoría de los 162 mil soldados de Washington, así como al ejército y la policía iraquíes, con alrededor de 200 mil hombres.
"Puedo decir que este esfuerzo será una de las prioridades de las unidades de combate durante este periodo previo al Ramadán" (el mes sagrado de los musulmanes), que iniciará la segunda semana de septiembre, dijo el jefe militar estadunidense que pidió el anonimato.
En 2006, el ejército de Washington ha registrado las más altas cifras de fallecimientos desde la invasión, debido a la intensificación de ataques rebeldes.
Para septiembre se tiene previsto que el comandante del ejército de ocupación, el general David Petraeus, presente al Congreso un informe sobre los resultados obtenidos con el despliegue de 20 mil uniformados en Irak (hasta el cierre de 2006 había unos 140 mil), la mayoría para reforzar la cobertura en Bagdad.
Pese al recrudecimiento de la guerra, un portavoz del Pentágono, Bryan Whitman, negó que existan planes para establecer el reclutamiento obligatorio, cancelado en 1973.
La especulación surgió tras de que el fin de semana el subconsejero de seguridad de la Casa Blanca, el teniente general Douglas Lute, declaró a una emisora de radio que a los altos mandos les preocupa el decaimiento en la moral de la tropa, a causa de los repetidos despliegues en Irak.