En Santiago, Nuevo León, cuatro personas fueron secuestradas por un comando armado
Asesinan y sepultan clandestinamente a dos hombres en un predio de Guanajuato
Las procuradurías de Justicia de Guanajuato y Michoacán confirmaron la muerte de cuatro personas, dos en cada entidad, mientras en Nuevo León un comando armado secuestró a tres personas en el municipio de Santiago, tras incursionar a dos bares y someter a los clientes.
César Adrián Gómez Torres, de 19 años, y Roberto Castro Lara, de 38, fueron encontrados muertos y sepultados en una finca en obra negra en el municipio de Valle de Santiago, Guanajuato. La procuraduría estatal informó que las personas tenían por lo menos 10 días de haber fallecido.
La dependencia precisó que el sistema de emergencia 066 recibió el reporte del hallazgo, por lo que agentes acudieron al lugar. Familiares de Castro Lara explicaron que éste compró hace casi tres meses la finca donde lo encontraron sin vida, y que había desaparecido desde el pasado 13 de julio. En el lugar encontraron casquillos de arma de fuego.
En Morelia, Michoacán, un enfrentamiento entre presuntos narcomenudistas dejó como saldo dos muertos y un lesionado. Según reportes policiacos, al mediodía de ayer, en la colonia Prados Verdes, el dueño de un taller mecánico salió de su negocio y agredió a balazos a dos sujetos que pasaban por el lugar; sin embargo, respondieron al ataque y dieron muerte a Edmundo Palacios Velázquez. Se presume que fue un ajuste de cuentas, pues según vecinos, el taller mecánico servía como centro de distribución de drogas.
En tanto, un comando de hombres armados secuestró la madrugada de este sábado a tres personas en el municipio de Santiago, Nuevo León, tras incursionar a dos bares y someter a los clientes.
Las autoridades reportaron que de acuerdo con información de testigos y algunos de los afectados, después de las dos de la mañana unos ocho sujetos armados y vestidos de negro arribaron al bar El Sótano, localizado a la altura del kilómetro 245 de la Carretera Nacional, para posteriormente llevarse en una camioneta al encargado del negocio, hasta el momento no identificado, así como a una mujer que lo acompañaba, conocida como La Barbie.
Minutos después, al parecer el mismo grupo ingresó al bar El Sotanito de la comunidad de San Pedro, en el mismo municipio, que supuestamente pertenece al mismo dueño. De ahí se llevaron a un joven conocido como Miguel, que sería hijo del propietario del negocio, originario de Reynosa, Tamaulipas.