Asignarle tan bajo presupuesto en México, es inadmisible, indica Lourdes Arizpe
Frustrante, ignorar a la cultura como ''una política de desarrollo en el PND''
El financiamiento es ineficaz si sólo se apoya a instituciones y burocracia, dice la especialista
Todas las expresiones del arte deben tener prioridad en ese plan, afirma Raquel Tibol
El pasado 31 de mayo, el presidente Felipe Calderón presentó su Plan Nacional de Desarrollo (PND), en el cual se dedican apenas dos páginas a explicar en qué consisten las tres ''estrategias" con las que su gobierno apoyará a la cultura, que vincula con ''el entretenimiento sano" para ''toda la sociedad", la apertura de espacios alternos, ''la multiplicación de talleres de artes plásticas, escénicas, literarias, para que la población en todas las regiones pueda participar y aprovechar la riqueza cultural y artística", así como ''para alentar la creación de pequeños y medianos negocios".
Fue una ''desilusión que en dicho plan nacional no se planteara a la cultura como una política de desarrollo; que no se haya roto con esa visión tan retrógrada que hubo en los seis años de gobierno de Vicente Fox, de que la cultura es únicamente las bellas artes y los mecenazgos. Eso no es la cultura", expresó ayer a La Jornada la investigadora e integrante del Comité de Políticas para el Desarrollo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Lourdes Arizpe Schlosser, luego de su conferencia en el salón verde de la Cámara de Diputados, a propósito de los 25 años de la Declaración de México sobre Políticas Culturales.
''Asimismo, es preocupante la poca prioridad que se ha dado al presupuesto, no sólo para la cultura, sino también para la ciencia. Esa situación en ninguna nación ocurre, los países saben que la ciencia, la tecnología y la cultura son el motor del desarrollo, entonces, no es posible que en México se designe un bajísimo presupuesto a esas áreas.
''Es importante entender que el financiamiento para la cultura no es eficaz, si lo que se está financiando es instituciones y burocracia. Su eficiencia radica en que se vierta hacia la población, la cual tiene los activos culturales que luego pueden generar ingresos.
''El reto es que el presupuesto no se quede en el ámbito del gobierno y sus instituciones. A futuro se corre el riesgo de ser una sociedad quebrada, como la de Inglaterra. Margaret Thachter se rehusó a apoyar cualquier iniciativa social, porque decía que sólo existían los individuos y no la sociedad. De tal manera que sólo apoyó a los individuos que tenían la avaricia de hacer más dinero, porque quería crear empresarios. Ganar dinero por encima de cualquier consideración ética, de identidad y nacionalidad."
Para Arizpe, ''se debe apoyar la actividad artística y cultural creativa cotidiana de la gente, pues se tiene un legado de talento extraordinario. Hoy día las instituciones culturales internacionales manejan una visión basada en las industrias culturales, digitales, en apoyo a intervenciones artísticas; y los mexicanos las están haciendo, pero solos, porque no tienen apoyo y porque a la sociedad mexicana no se le informa. Ahí hay una separación entre la sociedad, el público y el apoyo a formas muy restringidas de cultura.
''Esperamos -concluyó Arizpe- que las nuevas autoridades culturales, quienes están tomando un tiempo de reflexión para un nuevo plan de desarrollo cultural, tengan otro planteamiento respecto del presentado en el PND."
Definición ''ridícula y frívola''
Acerca de la política cultural de la presente administración, la crítica de arte Raquel Tibol expresa: ''Quién sabe en qué diccionario el señor Felipe Calderón habrá encontrado que la cultura es nada más entretenimiento. Hay un sector de la cultura que es para entretenerse, pero la cultura es ciencia, es arte, en todas sus modalidades, es técnica, sobre todo en la actualidad. No se puede separar ni la cultura artística ni la cultura científica de la cultura técnica. En el PND hay que darle prioridad al conocimiento, al avance científico y al arte en sus expresiones más profundas".
Por su parte, Víctor Hugo Rascón Banda, dramaturgo, considera que la definición de cultura que hace el Plan Nacional de Desarrollo, presentado por Calderón hace casi dos meses, ''es ridícula, cursi, frívola y errónea. El PND en cultura contiene generalidades, obviedades, lugares comunes y no asume responsabilidades concretas. Al presidente Felipe Calderón le faltan dos cosas: interés y asesores. Me preocupa -y ojo con el turismo cultural-, que prevalezca la ley del mercado en detrimento del patrimonio, como sucede actualmente en Quintana Roo, Oaxaca y San Luis Potosí. Debemos recordar el Casino de la Selva, en Cuernavaca, donde por cien empleos se destruyó un valioso patrimonio.
''Por lo que respecta al arte y al deporte, no son la misma cosa, ni merecen el mismo tratamiento. Hace 3 mil años, los griegos dijeron: 'junto al estadio el teatro', significa que son dos áreas de desarrollo humano completamente diferentes y complementarias.
''Cuando el PND ya estaba impreso y hace alusión a un diagnóstico, apenas se estaba consultando a la comunidad en estos foros que convocó el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes en todo el país. Una pregunta, ¿de qué sirvieron las ponencias y el esfuerzo de los participantes, si sus ideas no están contempladas en este plan que se hizo en un escritorio?"