El proyecto fue autorizado de manera irregular, dicen habitantes de cuatro municipios
Hoy, marcha en demanda de que cancelen megadesarrollo habitacional en Morelos
Exigen que el gobernador Marco Antonio Adame aclare si va a atender el problema
Este lunes, representantes de 45 comunidades morelenses que se verán afectadas por la construcción de unas 50 mil viviendas realizarán una marcha pacífica hacia el palacio de gobierno en Cuernavaca, Morelos, en demanda de que las obras sean suspendidas y las autoridades estatales decidan si pueden dar solución a ese problema.
Agrupados en el Consejo de Pueblos en Defensa del Agua, la Tierra y el Aire de Morelos, pobladores de los municipios de Zacatepec, Puente de Ixtla, Tlaltizapán y Emiliano Zapata llevan dos años solicitando que se cancele la edificación de la unidad habitacional de la empresa Urbasol, ya que se autorizó de manera irregular y la manifestación de impacto ambiental no consideró la situación real del agua en la región, aseveró Cutberto Neri Solís.
Explicó que durante ese tiempo los campesinos han documentado sus denuncias contra los desarrollos, pero sus planteamientos han sido ignorados por varias dependencias, desde federales hasta municipales. Entre éstas destacan la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Comisión Nacional del Agua. Asimismo, los gobiernos del estado y municipal. Todas ellas, continuó, han hecho caso omiso.
Actualmente, abundó Neri Solís, el gobierno estatal ha desconocido los acuerdos logrados. Explicó que después del 4 de junio, cuando residentes de los poblados afectados trataron de repartir volantes en la caseta de la autopista a Alpuyeca y fueron agredidos por granaderos, acordaron negociar y se comprometieron a que Urbasol iba a suspender las obras.
Según el subsecretario de Gobierno, no se pueden detener los trabajos
Detalló que mientras el diálogo se llevaba a cabo, la constructora reinició los trabajos, y ya lleva un mes así. Debido a ello hablaron con el subsecretario de Gobierno del estado, Rafael Martínez, quien les dijo que no se podían detener las obras.
Eso es inaceptable, expresó Neri Solís, porque las autoridades pueden apelar a diferentes leyes para detener esos trabajos, pero no les interesa la problemática. Debido a ello, aseveró, este lunes se efectuará la movilización para hablar con el gobernador del estado, Marco Antonio Adame, y que sea él quien tenga la última palabra. Que diga, añadió, si puede resolver ese conflicto.
Indicó que si el mandatario cancela la obra, la gente volverá a sus comunidades. En caso contrario, advirtió, se evaluarán otras medidas para dar solución a la problemática. Recordó que Rafael Martínez los amenazó con que si tomaban algún tramo carretero, habría "mano fuerte" y saldrían lastimados.
La empresa Urbasol proyecta construir 2 mil casas en una primera etapa. Después, 40 mil más en la zona cercana al manantial Chihuahuita, el cual se vería contaminado y afectado, al igual que los de Santa Rosa, el Zapote y el Salto, los cuales abastecen a 100 mil habitantes de los cuatro municipios.
Dos comunidades utilizan el agua de esa zona para cultivar caña de azúcar y maíz. En esa región, que era la principal productora de arroz, ese grano dejó de ser sembrado precisamente por los problemas de suministro, ya que requiere una elevada cantidad del líquido, concluyó Neri López.