Dejan el cerro del Fortín cuerpos estatales; fin de los retenes federales en carreteras
Junto con la Guelaguetza, termina el cerco policiaco-militar en Oaxaca
Ampliar la imagen En imagen de archivo, el auditorio Guelaguetza, en el cerro del Fortín Foto: José Carlo González
Oaxaca, Oax., 31 de julio. El auditorio Guelaguetza fue desocupado hoy por policías de cuatro corporaciones de Oaxaca, al terminar la festividad de los Lunes del Cerro. También se retiraron los elementos del Ejército y de la Agencia Federal de Investigación (AFI) que se encontraban en carreteras que comunican a esta ciudad.
Durante 15 días, como parte del Operativo Guelaguetza 2007, diseñado por la Secretaría de Protección Ciudadana (Seproci), agentes de las policías Preventiva, Ministerial, Municipal y Bancaria resguardaron el inmueble ubicado en el cerro del Fortín.
Los uniformados tenían como encomienda impedir el ingreso de integrantes de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), que habían programado boicotear las presentaciones folclóricas.
En los dos accesos al auditorio, sobre la autopista internacional Cristóbal Colón, la policía también estableció varios retenes para revisar autobuses, camiones y vehículos particulares. Mientras, militares y elementos de la AFI instalaron puntos de revisión en las carreteras que comunican a la capital.
Al inicio de la aplicación del dispositivo policiaco, el 14 de julio pasado, el titular de la Seproci, Sergio Segreste Ríos, dijo que el resguardo del inmueble y la revisión de vehículos tenían como propósito "detectar armas de fuego o explosivos, y no reprimir a miembros de movimientos sociales.
"La finalidad es que el auditorio no sea objeto de un atentado con explosivos, ante las amenazas del Ejército Popular Revolucionario. Es una instalación estratégica y un hecho así tendría repercusión internacional", planteó en aquella ocasión.
También subrayó que ni la sección 22 del SNTE ni la APPO habían solicitado permiso para ocupar el auditorio y poder presentar ahí su festividad, denominada Guelaguetza Popular. "Si no hay permiso, hay que poner orden", asentó.
Dos días después, la policía impidió el paso de una marcha de más de 10 mil simpatizantes del movimiento magisterial y popular que avanzaba al auditorio Guelaguetza, lo que ocasionó un enfrentamiento de más de tres horas que dejó un saldo de 34 detenidos y una decena de heridos.
Desde la mañana de este martes, los dos accesos quedaron libres a la circulación. A las afueras del recinto quedaron las vallas utilizadas por los policías para establecer los retenes, los módulos que se acondicionaron como dormitorios y comedores, así como las letrinas.
Se espera que la policía realice un cerco en las primeras horas de este miércoles a las instalaciones de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión, propiedad del gobierno estatal, por la realización de una marcha de la APPO, al cumplirse un año de la ocupación de ese inmueble.