La puesta en escena se representa de viernes a domingo en el Teatro Helénico

Las copias, obra que plantea las dudas éticas de la clonación humana

"Quién no se tomaría una segunda oportunidad", plantea Mario Espinosa, director del montaje

ARTURO CRUZ BARCENAS

En el presente o futuro inefable, el planteamiento de Mary Shelley de crear una criatura a imagen y semejanza de su creador es o será posible. Cada quien puede o podrá tener su propio Frankenstein, un hijo con las cualidades y modo de ser, con fenotipo y genotipo ad-hoc. Tal es uno de los planteamientos de la obra de teatro Las copias, que se escenifica desde el 29 de junio en el Teatro Helénico, basada en el original de la dramaturga británica Caryl Churchill, dirigida por Mario Espinosa. Lamentablemente, este es buen teatro con poca asistencia.

¿Y si cualquier persona se encuentra, al dar vuelta en una esquina, con una especie de gemelo? Este no ha nacido de la misma madre, sino que ha sido creado en laboratorio. ¿Y si se sabe que no sólo hay uno, sino otros 19? ¿Cómo enfrentar lo que se ha sido y se va a ser?

Las copias es una obra que deja muchas preguntas en la mente del espectador. En un momento de la puesta, el multicopiado Bernardo 1 (el actor Rodrigo Murray) dice a su padre David (Luis Rábago): "Todas las personas compartimos el noventa y nueve por ciento de nuestra información genética. También compartimos el noventa por ciento con los chimpancés, treinta por ciento con la lechuga. ¿No te entusiasma saber esto? Me encanta la lechuga".

Semejanza con una lechuga

Se puede identificar alguien con una lechuga más que con otro yo que anda por la calle. ¿Cómo saber cuál es el original? ¿Y si mi padre no lo es? ¿Si el que creo que es, es una copia del original? El director Mario Espinosa expuso: "¿Quién no se tomaría una segunda oportunidad? ¿Quién resistiría a la tentación de corregir el pasado, de cambiar decisiones fundamentales de la vida, o de simplemente querer tenerlo todo a la vez?

"La naturaleza humana nos ofrece la libertad de elegir, al mismo tiempo que nos obliga a renunciar a todo aquello que no escogemos. Sin embargo, David ha tenido el privilegio de poder enmendar su pasado. Un día, David recibe visitas inesperadas que ponen en peligro el mundo que ha construido paso a paso en los últimos 36 años. El precio de esta segunda oportunidad amenaza con ser muy alto."

El padre de David resulta ser un tipo pragmático que cuenta un pasado a cada una de las copias, que, de alguna manera, son sus hijos. A cada encuentro con uno de los seres imitados en el laboratorio, el progenitor se revela crudo, egoísta y hasta malvado, ruin. Deseó un hijo con ciertas cualidades, de acuerdo con su modelo propio, pero eso lo hará desechar al que la naturaleza le ha dado.

Miente a cada uno y en la puesta en escena este personaje no es sincero. Sentado en su sillón café, con la mirada fija en algún punto del universo, sólo ve para sí y hasta piensa en hacer negocio al demandar a quien hizo copias de más. Multiplica cantidades: si son 20, 20 por...

En sólo una hora, esta pieza teatral introduce al espectador en las preguntas éticas sobre la clonación humana. El padre ha deseado moldear a su familia. ¿Es esta la clave del bienestar y prosperidad de la raza humana? La trama surca las complejas relaciones entre un padre y sus dos hijos, uno original y otro clonado. Definido por algunos críticos británicos como un thriller sicológico, el libreto afronta un valiente debate sobre la verdadera naturaleza de la identidad al usar la clonación como su estandarte.

Gracias a este perturbador libreto, muchos especialistas han puesto el dedo en la llaga al afirmar que la obra es la primera gran tragedia del siglo XXI. Las copias tiene un carácter insurrecto. Caryl Churchill explora, desde la dinámica familiar, una pesadilla que está a mitad de camino entre posibilidad y realidad. Genética, naturaleza, educación, paternidad, son los hilos que entreteje para abrir paso al profundo debate que impone la clonación humana.

Nueva oportunidad

Es una ficción inmediata. A cada momento los protagonistas afrontan responsabilidades, asumen los nervios que no les permiten articular frases; divagan y padecen la insatisfacción de sus hechos. Por tanto las incoherencias en los diálogos y acciones son una consecuencia directa de la capacidad de elección del ser humano.

Se basa en un padre viudo de 60 años que después de vivir en tranquilidad durante 36 primaveras recibe la visita de su hijo. Este le dice que en un hospital le han informado que es parte de un lote de entre 10 y 20 personas genéticamente iguales.

De un hijo original se replicó el hijo dos y más tarde otros. Todos son iguales y diferentes. El padre fue ausente y agresivo con el primer hijo. Sin embargo, la vida bajo circunstancias excepcionales le da la oportunidad de corregir su pasado. Tiene la posibilidad de probar su capacidad para superarse, vencer sus adicciones y criar amorosamente a un nuevo hijo, copia fiel del primero. Pero se muestra egoísta, pues sólo ha pensado en su felicidad.

Las funciones son viernes, 20:30 horas; sábados, 18 y 20:30; domingos, 18 horas. Teatro Helénico, avenida Revolución 1500, teléfono 3640 3139. Descuentos para INAPAM, maestros y estudiantes con credencial.