En 2012 la plataforma será de 2 millones 500 mil barriles diarios, según ajustes oficiales
Caen previsiones de producción y restitución de reservas de petróleo
Plantea el gobierno construir 800 kilómetros de gasoductos con capital privado
No se propone la autosuficiencia en elaborar gasolinas
Capacidad subutilizada en subsidiarias de Pemex
El gobierno federal ajustó a la baja la plataforma de producción de crudo, estimada para 2012 en 2 millones 500 mil barriles diarios, lo que significa una reducción de poco más de 650 mil barriles por día de petróleo, con respecto al volumen obtenido en los primeros cinco meses de este año.
Además, redujo la tasa de restitución de reservas de hidrocarburos a 50 por ciento, cuando inicialmente Petróleos Mexicanos (Pemex) esperaba llegar al 100 por ciento hacia finales de la actual administración. Es decir, por cada barril de producción, reponerlo con descubrimientos susceptibles de ser explotados a corto plazo.
De acuerdo con el Programa Nacional de Infraestructura 2007-2012, se prevé que los proyectos de aguas profundas sólo serían realizables en el escenario sobresaliente, que permita obtener los recursos necesarios para la exploración y producción en aguas del Golfo de México.
Adicionalmente plantea construir, con recursos privados, al menos 800 kilómetros de gasoductos, y mantener la producción de gas natural en 5 mil millones de pies cúbicos diarios.
El documento establece tres escenarios: uno, inercial, otro base, y el sobresaliente. En el escenario inercial para 2012 se estima una producción de petróleo crudo de 2.4 millones de barriles al día, mientras en el base se establece como meta 2.5 millones de barriles diarios, y en el escenario sobresaliente se fija una meta de 3.2 millones de barriles por día, objetivo muy semejante al actual nivel de producción.
El texto aclara que el escenario base que se presenta en el Programa Nacional de Infraestructura es distinto al escenario base considerado en otras publicaciones oficiales del sector energético, elaboradas tanto por la Secretaría de Energía, como por las entidades correspondientes, debido a las diferencias en la previsión de recursos considerada en cada uno de dichos documentos.
El programa presentado el miércoles pasado por el Ejecutivo federal en ningún momento plantea la autosuficiencia en la producción de gasolinas, y sólo prevé ''realizar las acciones necesarias para incrementar la capacidad de proceso de crudo a por lo menos 1.4 millones de barriles diarios en 2012''. Pero establece la necesidad de mantener una relación de importación a ventas de gasolina no mayor a 40 por ciento.
Dentro de las estrategias y metas se pretende incrementar la capacidad de almacenamiento, suministro y transporte de petrolíferos, sin especificar por medio de qué fuente se obtendrán los recursos financieros necesarios, o se espera que con modificaciones al actual marco legal pueda participar el sector privado. También considera la posibilidad de promover inversiones ''complementarias'' en petroquímica.
Capacidad instalada ociosa en las subsidiarias de Pemex
Estos escenarios se tornan más preocupantes cuando se observa que hay una capacidad subutilizada en las cuatro principales subsidiarias de Pemex.
Según información entregada a la Bolsa Mexicana de Valores, así como a intermediarios financieros internacionales, se indica que Pemex Gas opera a 72 por ciento de su capacidad total, y Petroquímica Básica, a 60 por ciento.
Pemex Exploración y Producción y Refinación, los dos organismos más rentables de la paraestatal, operan a 98 y 87 por ciento, respectivamente.
Al respecto, Pemex precisó que en refinación el aprovechamiento máximo del crudo se da en función de los procesos limitantes o críticos. ''En nuestro caso esos son las plantas de reformación, conversión catalítica y de coquización. Estos procesos operan en toda su capacidad. Es por esto que se puede decir que las refinerías en México aprovechan al máximo su capacidad''.
Explicó que si se llegara a procesar crudo utilizando la capacidad excedente de destilación primaria se generarían productos intermedios (no terminados), que no cumplen con las especificaciones de calidad requerida por el mercado.
Para el caso de la petroquímica, Pemex refirió que se debe tener precaución en no confundir capacidad instalada de una planta petroquímica con la producción susceptible de venta, ya que existe una diferencia fundamental entre ambos conceptos.
La paraestatal precisó que la demanda en el país y en el mundo de materias primas y productos petroquímicos ha cambiado drásticamente en las últimas décadas. En el proceso, algunos productos se han vuelto más rentables que otros, lo que ha motivado que el costo de oportunidad haya cambiado, afectando al margen del proceso productivo.
''Cambios en la situación de mercado y consideraciones de carácter estratégico tornan no rentable producir a toda la capacidad instalada''. A nivel internacional, las plantas petroquímicas, en promedio, producen a 85 por ciento de su capacidad, mientras en México operan al 60 por ciento.
Otros de los aspectos, precisó Pemex, es el cambio tecnológico en la industria petroquímica que ha sido profundo, particularmente en algunos procesos productivos, por lo que la producción en algunas plantas resulta económicamente desfavorable. ''Renovarlas para que se adapten a tecnologías modernas requiere inversiones considerables, con las que no se ha contado''.
Además, los costos de la materia prima son cambiantes, en particular en insumos en los que el precio internacional de la región en la que opera México resulta muy superior al de insumos de otras regiones del mundo. Incluso, en toda la región del Tratado de Libre Comercio se ha dejado de producir un importante volumen de petroquímicos.