Invalida el Tribunal Supremo el proceso para extraditar al ex represor a Argentina
Cavallo será juzgado en España por terrorismo y genocidio
Abogados de las víctimas solicitan a la Audiencia Nacional la apertura del juicio oral
Enfrenta el acusado una pena de hasta 13 mil años de prisión por asesinato de españoles
Madrid, 18 de julio. El Tribunal Supremo de España resolvió este miércoles que la justicia española es competente para procesar al militar argentino Ricardo Miguel Cavallo, extraditado por México, por lo cual el ex represor de la última dictadura en Argentina (1976 y 1983) seguirá detenido en este país, donde enfrentará un juicio por terrorismo y genocidio.
El Tribunal Supremo notificó la competencia de la Audiencia Nacional para juzgar a Cavallo, y estimó de esta forma los recursos interpuestos por la Fiscalía y las acusaciones contra la decisión de esta última instancia judicial, decidida en diciembre de 2006, de no procesarlo y dar prioridad a la justicia argentina, que también lo reclama por su participación en la política de exterminio de la dictadura.
Desde su traslado a España desde México, hace tres años, Cavallo ha permanecido en la prisión de alta seguridad de Soto del Real, de la que sólo ha salido para comparecer ante el juzgado del magistrado instructor del caso, Baltasar Garzón, quien, después de numerosas pruebas periciales y testimonios de víctimas, decidió cerrar la fase previa y enviar el caso a la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.
Pero este órgano decidió renunciar a su jurisdicción para juzgar estos delitos e iniciar los trámites para le extradición de Cavallo a Argentina. Sin embargo, el Tribunal Supremo español invalidó esta doctrina de la Audiencia Nacional, al tiempo que ratificó la jurisdicción de los tribunales para juzgar los delitos de lesa humanidad, en virtud de la doctrina de la justicia universal.
El alto tribunal aceptó los argumentos de la Fiscalía del Estado y la parte acusadora, que sostienen que en el caso de Cavallo hubiera sido trasladado a Argentina, se habría incurrido en un "fraude de derecho" de cara a las autoridades mexicanas, que en 2003 autorizaron la extradición de Cavallo a España, de acuerdo con lo estipulado en el Tratado Bilateral de Asistencia Mutua con México.
Asimismo, hubiera representado un fraude de ley desde el punto de vista de la legislación española, además de que en Argentina no hubiera sido juzgado por los mismos delitos y con la misma celeridad que en España, donde su causa se encuentra muy avanzada. Aquí se le acusa por el asesinato de ciudadanos españoles o descendientes de éstos durante la dictadura argentina.
Manuel Ollé, representante de las víctimas, anunció que este mismo día presentó ante la Audiencia Nacional el escrito en el que se solicita la apertura del juicio oral, una vez que la defensa de Cavallo ya no tiene ningún resquicio legal para evitar que su defendido sea juzgado en España, donde podría ser condenado a una pena de más de 13 mil años de cárcel.
Cavallo, conocido por el alias de Serpico cuando llevaba a cabo tareas de tortura y exterminio en la Escuela Mecánica de la Armada (Esma, el mayor centro de represión de la dictadura), fue detenido en Cancún en 2000 por la policía mexicana en colaboración con la Interpol, cuando iba abordar un avión en el que pretendía huir a Argentina luego de ser reconocido por supervivientes de la dictadura argentina.