Documental refleja drama de parejas gays binacionales en EU
Nueva York, 15 de julio. El drama de las parejas gays binacionales separadas por las leyes de inmigración de Estados Unidos, puesto en escena por el cineasta argentino Sebastián Córdoba, dará el salto esta semana a la pantalla grande en Filadelfia y Los Angeles.
El documental, llamado Through Thin and Thick (En las buenas y en las malas) será presentado mañana en Outfest, el festival gay de Los Angeles, uno de los más prestigiados del mundo, en el Directors Guild of America.
En la cinta se recogen historias de parejas homosexuales estables cuyas familias se ven desgajadas por la negativa del gobierno a aprobar la Ley de Defensa del Matrimonio (Defense of Marriage Act) entre parejas del mismo sexo, mediante la cual podrían disfrutar de los mismos beneficios migratorios que un matrimonio tradicional.
La problemática, según el director argentino, es un tema ajeno a una gran mayoría y algo que vivió en carne propia, por lo que decidió realizar la cinta.
Desamparo legal
"Experimenté el miedo de no saber qué iba a pasar conmigo, con la pareja y con el amor que sentíamos el uno por el otro", afirma Córdoba, quien después de separarse de su pareja de nacionalidad estadunidense aún sigue en el limbo con su situación legal. De haber seguido juntos, nunca habría obtenido el beneficio de la residencia permanente, como si se tratase de un matrimonio convencional.
Actualmente hay casi 20 países que otorgan beneficios migratorios a parejas binacionales gays cuando un miembro de la pareja es de ese país, por ejemplo Sudáfrica o Brasil. Pero en Estados Unidos unas 36 mil parejas homosexuales -según el censo de 2000- todavía no ven la luz al final del túnel. Se ven amenazadas por las leyes migratorias.
Para Córdoba una de las historias más conmovedoras del documental es la de Mark y Fred, un francés y un estadunidense con dos hijos adoptados, que se ven obligados a dejar el país porque el europeo no tiene papeles para trabajar. Al verse reducidos los ingresos de la pareja, deciden poner su casa en venta y viajar a Europa, dejando atrás una hermana paralítica cuya única razón de vivir son esos lazos afectivos.