Castillo se mostró contento por el buen futbol que se desplegó
Cumplimos los objetivos y se ganó credibilidad, aseguró Hugo Sánchez
Pese a llegar casi a las cuatro de la madrugada, la selección nacional de futbol fue recibida por unas cuatro docenas de aficionados y familiares en la terminal aérea de la ciudad de México, adonde arribó ayer domingo luego de conseguir el subcampeonato y el tercer sitio en las copas de Oro y América, respectivamente.
Una colorida manta dio la bienvenida a Fausto Pinto, además de las sonrisas, los apretones de mano, las peticiones de autógrafos y fotos con celular, así como las palmadas en la espalda que recibieron varios de los jugadores que regresaron con la idea de haber obtenido un balance positivo en el periplo deportivo en Estados Unidos y Venezuela.
Israel Castro, Jonny Magallón, Pinto y otros, pese al evidente cansancio, hablaron de lo que calificaron de positiva labor con el seleccionado nacional, aunque ahora deberán reportarse con sus equipos o conseguir algunos días extras de descanso para recuperar energías, como el caso de los dos primeros, quienes fueron acosados por los madrugadores aficionados para obtener una firma.
Recepción silenciosa
Fue una recepción silenciosa, sin gritos ni ovaciones, pero con harto cariño que los asistentes mostraron a los seleccionados, quienes no dudaron en obsequiarles unos segundos de su atención para cumplir con darles por escrito un recuerdo o firmar una fotografía de alguna revista deportiva.
Ya en el salón de usos múltiples, el estratega Hugo Sánchez fue claro al apuntar que los principales logros alcanzados fueron "haber conseguido estilo e identidad propios", ambos difíciles de obtener, pero en su opinión lo hizo en seis meses, lo cual no logró su antecesor en cuatro años.
Luego entró al ámbito de los conceptos al definir que "la identidad es algo muy importante, más que el estilo, pues se trata que los jugadores reconozcan que juegan por algo y por alguien, que se sientan mexicanos y defiendan ser mexicano, eso es identidad; y el estilo es en el esquema táctico, tal vez no se alcanzó al ciento por ciento, pero ya saben cómo juega la selección nacional".
Evasivo al no responder sobre la deserción de Carlos Salcido, Pável Pardo, Ricardo Osorio, y luego de Rafael Márquez, el Pentapichichi soltó que cuando se "opina de lo que ocurre 'a lo lejos', normalmente se miente y no pasa nada. Pero quienes estuvieron allá se enteraron bien de todo, porque es como el amor de lejos...", y cambió de tema.
Explicó que siempre tendrá las puertas abiertas para quienes, con deseo, calidad y merecimientos, puedan integrarse al Tri, de acuerdo con lo que decida con su cuerpo técnico, aunque con tono amenazante aseguró que quienes no quieran estar, solos irán saliéndose.
También apuntó haber conseguido credibilidad al decir que "cumplió con los objetivos (aunque había hablado de ganar el certamen sudamericano), algo que no se compra en la tienda de la esquina, sino se muestra con hechos"
Merecido tercer sitio
Antes de invitar a la prensa a convertirse en "su cómplice" para cumplir con sus fines, estimó que terminar en el tercer sitio "es el lugar que México se merece", aunque para llegar a ser campeones del mundo no será un trabajo fácil, "pues no se tiene una varita mágica y ya", se requerirá planeación, trabajo y paciencia, "en eso estamos".
A su vez, el as bajo la manga en que se convirtió Nery Castillo apuntó que "hay que estar muy triste por no haber jugado esa final (de la Copa América), pero muy contento por el esfuerzo que se hizo y el buen futbol que se demostró", además de hacer goles en momentos importantes para la causa nacional.
Agregó que "me resultaría lindo" que el Olympiakos lo dejara salir, porque como cualquier futbolista le gustaría jugar en uno de los equipos grandes de Europa.
A su lado, el portero Guillermo Ochoa se mostró contento de haber sido parte del equipo que obtuvo tan importantes logros internacionales, pero nada quiso comentar acerca de si en lo personal ya se considera el titular indiscutible bajo el arco del Tricolor, porque su único pensamiento es estar listo para cuando el técnico lo requiera, y reiteró no tener nada en concreto para emigrar al viejo continente.
Quien además de satisfecho se mostró emocionado fue el volante Andrés Guardado, no sólo por su participación en el cuadro nacional, sino por su contrato con el Deportivo La Coruña.