Usted está aquí: viernes 13 de julio de 2007 Estados Querétaro declara Peña de Bernal área protegida

Pide a la UNESCO reconocimiento para 200 capillas

Querétaro declara Peña de Bernal área protegida

MARIANA CHAVEZ

Querétaro, Qro., 12 de julio. El gobierno estatal declaró área natural protegida las 280 hectáreas donde se ubica la Peña de Bernal, enclavado en la comunidad del mismo nombre, en el municipio de Ezequiel Montes, catalogada como ''pueblo mágico'' por la Secretaría de Turismo federal.

La Peña de Bernal es el tercer monolito más grande del mundo, con 288 metros de altura. Antes de la llegada de los españoles, grupos chichimecas habitaron las faldas de la peña, la cual consideraban sagrada.

En un acto para dar a conocer la declaratoria, el gobierno estatal entregó al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) un expediente técnico para que se envíe a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), como parte de una petición para que se considere patrimonio cultural de la humanidad más de 200 capillas otomíes-chichimecas en los municipios de Tolimán y Ezequiel Montes.

El expediente para declarar patrimonio cultural de la humanidad las más de 200 capillas donde indígenas otomíes recuerdan a sus muertos, fue recibido por el director de patrimonio mundial del INAH, Francisco López Morales, quien turnará el documento a la sede de la UNESCO en París, Francia.

Miguel León Portilla, investigador emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), dijo: ''Este proyecto no solamente se va a referir al Peñón de Bernal o a las capillas, que son interesantísimas. No se va a referir sólo a la lengua o a las creencias; se va a referir al bien que es el alma de un pueblo'', expresó.

Indicó que se necesita un México ''más justo'' que atienda a los pueblos indígenas, los cuales han resistido a diferentes circunstancias, entre ellas haber sido relegados a zonas de refugio y ''lugares que otros no quieren''.

El director general de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, Luis H. Alvarez, indicó que los más de 20 mil otomíes que habitan en el semidesierto de Querétaro son testimonio vivo de una cultura que persiste.

Sin embargo, Guadalupe de León de Santiago, indígena del municipio de Tolimán, denunció que las capillas han sido saqueadas por personas ''a las que no les interesa'' su cultura.

 
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