Penultimatum
Bonanza por filmes pirata
Sin duda, sera uno de los videos que tendrá mayor demanda. Nos referimos al que preparan la Paramount y Comedy Central, compañías que patrocinan las historias que tienen lugar en South Park, el pueblo de dibujos animados que desde hace 10 años somete a escarnio a los personajes públicos más influyentes de Estados Unidos, Europa, Medio Oriente y Asia. Nadie importante en el plano político ha escapado a su irreverente humor y crítica. En mayo pasado, y como parte de su gira en pos de la candidatura demócrata a la presidencia del vecino país, los creadores de la serie mandaron de visita a South Park a la senadora Hillary Clinton. Sólo que los malvados guionistas le colocaron en esa visita una bomba nuclear en la vagina. Todo comienza en el momento en que Hillary pide con gran elocuencia su voto a los habitantes del pueblo. En ese momento un cerdo rosa salta sobre ella y la derriba. No era cualquier cerdo sino uno especialmente entrenado por el servicio de inteligencia de Estados Unidos para buscar explosivos. Luego de ponerla a salvo de algún atentado, agentes especiales del servicio secreto le dicen a la esposa del ex presidente Clinton que trae una bomba nuclear en la vagina y que el cerdo sabe cómo desactivarla. Hillary solamente responde con una cara súper sensual: “Oh Dios mío”.
Las cosas no terminan allí en el capítulo dedicado a la aspirante a la candidatura demócrata, pues Cartman, uno de los niños “problema” que asisten a la escuela de South Park, secuestra a un alumno musulmán de reciente ingreso para interrogarlo muy al estilo Guantánamo. Lo hace porque piensa que es un niño terrorista que pretende matar a la senadora y crear así el caos en el vecino país. Miles de televidentes que no pudieron ver este capítulo pidieron que se exhibiera de nuevo, a lo cual se negó la cadena de televisión que transmite South Park, alegando su política de transmitir solamente una vez cada programa. Felizmente se podrá ver en dvd.
Segun cifras de la Motion Picture of America, en México se vendieron el año pasado 176 millones de películas pirata, mientras que por los canales legales apenas se lograron vender 21 millones. Esto causó pérdidas a la industria cinematográfica por más de mil millones de dólares e impidió la creación de miles de empleos formales. Pero además, la piratería canceló la posibilidad de que la venta de películas en formato dvd ayude a recuperar los capitales que invierten las casas productoras. Los operativos policiacos para decomisar películas pirata en puestos callejeros y en mercados establecidos solamente le dan un pellizco a un negocio millonario y cuyos cabecillas se mueven libremente gracias a la corrupción oficial.
La confesion de la semana: “Soy súper coqueto, soy un eterno enamorado de la belleza femenina y cuando pasa algo muy bonito a mi lado en realidad lo admiro. El que uno esté a dieta no te prohíbe ver el menú”: Alejandro Fernández, el inolvidable protagonista de una película inolvidable: Zapata, dirigida por un realizador igualmente inolvidable: Alfonso Arau.