Bancos en México comienzan a sufrir consecuencias del disparo en el otorgamiento
Imprudente, otorgar crédito de manera indiscriminada: Luzón
El director de Santander para América Latina no descartó un problema por la morosidad
La cartera vencida pasó de 4 a 10% del monto de los préstamos: 15 mil millones de pesos
Santander, 5 de julio. La banca que opera en México "está comenzando a sufrir las consecuencias" del disparo en el crédito ocurrido en años recientes, en especial al consumo con tarjetas. Es la apreciación que hace Francisco Luzón, director de la división América de Santander, el consorcio multinacional que controla la tercera red bancaria en México. "Si aparecen jugadores no prudentes con el otorgamiento del crédito, tendrán problemas", afirmó.
Consideró que "no es descartable" el surgimiento de "un problema" con la morosidad en los créditos al consumo. La cartera vencida pasó de representar 4 a 10 por ciento del monto prestado por la banca y situarse según cifras oficiales en unos 15 mil millones de pesos, 114 por ciento más de lo que era hace un año.
"No veo de momento que vaya a ocurrir un problema en México, pero no es descartable", señaló Luzón, consejero delegado de Santander y principal responsable de la vasta expansión de ese grupo en Latinoamérica. El consorcio, en términos generales, gestiona una tercera parte del sistema financiero latinoamericano.
Frenar la morosidad es una responsabilidad compartida, consideró. El proceso de incorporación de más personas a los servicios financieros "debe hacerse bien". "Algunos jugadores del sistema financiero están hinchando el crédito y eso no es prudente", dijo en referencia al sistema bancario en México.
Luzón, en una reunión con periodistas mexicanos que asisten al Cuarto encuentro Santander-América Latina, que este año se ha centrado en el tema América Latina, camino de una sociedad de clases medias, reveló que una institución como la que dirige en la región ya está tomando providencias ante el repunte de la morosidad.
Dio a conocer que en el último semestre Santander en México sólo ha aprobado una cuarta parte de todas las solicitudes de tarjeta de crédito que ha recibido.
En la charla tocó otro tema que se ha discutido en los últimos meses en México y que también es de atención en otros países de la región latinoamericana: la fijación de topes al cobro que hacen los bancos de los servicios que ofrecen a sus clientes. Incluso en México está aprobada una legislación, que no ha entrado en vigor, para que las instituciones abran cuentas sin comisión a personas de bajo ingreso.
"Mi postura con las autoridades mexicanas es que la competencia funciona, y funciona bien en todo el mundo", dijo Luzón. "Si queremos extender los servicios financieros, el precio no puede ser topado (limitado). Puede haber cobros diferenciados por el grado de riesgo y cumplimiento del usuario, porque si se cobra un precio estándar, se subsidia a uno y se castiga al cumplidor", añadió.
Aseguró que fijar topes a los costos de la banca lo que hace es quitar estímulos a las instituciones para incorporar a nuevos segmentos de población. Y ello, añadió, fomenta la informalidad. "Fuera del banco, un pequeño empresario tiene que ir con un agiotista que le cobra tasas de 80 por ciento contra tasas de 30 por ciento en la banca". Mencionó que Santander tiene un proyecto piloto en Venezuela, que piensa llevar a otras naciones de la región, de dar servicios bancarios a gente muy pobre, apoyados por grupos de jóvenes. En ese país, afirmó, los agiotistas cobran a los receptores del préstamo tasas de 80 por ciento semanales y el banco 30 por ciento anual.
Nuevamente en referencia a México, planteó que el banco que dirige quiere ampliar la cobertura de usuarios "porque es importante incorporar al sistema a clases más bajas y para eso hay que cobrar un precio. Si por hacer mal el tema de los precios abortamos el proceso de bancarización, habremos cometido un error".
México, afirmó, necesita del crédito de la banca. El país está en el último lugar en penetración financiera (el crédito al sector privado como proporción del producto interno bruto, que es en torno a 13 por ciento actualmente) y el financiamiento debería crecer a ritmos de 30 por ciento anual durante un largo periodo para contribuir al desarrollo del país". Y ese crecimiento, dijo, "debe ser a un precio justo".
No interesa Banorte
En el marco del encuentro, el consejero delegado del grupo y responsable de la división América anunció que Santander instalará un call center en Querétaro. También crecerá de 950 a mil 239 el número de sucursales y buscará que su universo de clientes crezca de 7.5 millones a 10.5 millones, que será 30 por ciento de lo que tienen en la región.
En este sentido, y a pregunta expresa durante la reunión con la prensa mexicana, afirmó que Santander no tiene la intención de lanzar una oferta por Banorte, el único banco de capital mexicano.
"Nuestro objetivo es tener 20 por ciento del mercado mexicano y ya lo tenemos. Quizá nos gustaría en pocos años tener 25 por ciento. Ello no quiere decir que no haya adquisiciones como el de alguna Sofol o una hipotecaria. Pero Banorte no está considerado", manifestó.