Colombia: rechaza Uribe recomendación de tres países europeos
Santafé de bogotá, 30 de junio. El presidente de Colombia, Alvaro Uribe, rechazó hoy la recomendación de tres países europeos para que acuda a la Comisión Internacional de Establecimiento de los Hechos e investigue las circunstancias en que murieron 11 diputados secuestrados por la guerrilla.
"El gobierno no acepta comunicados de los tres delegados europeos en los que ponen en igual nivel, miden con el mismo rasero a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y al gobierno", agregó Uribe, en alusión a una propuesta de Francia, España y Suiza, a los que exigió "respeto" para su país.
"No vamos a aceptar que los tres delegados europeos pretendan llevar a Colombia a una comisión de encuesta creada en el derecho internacional para estados de guerra. Esto no es un estado de guerra, sino un desafío del terrorismo contra un pueblo democrático", de "un terrorismo alimentado por el narcotráfico", sostuvo.
La llamada "comisión de encuesta" fue creada en 1991 al amparo de la Convención de Ginebra para estados en guerra y tiene sede en la ciudad suiza de Berna. Es un cuerpo permanente cuyo objetivo es investigar las violaciones a la ley internacional humanitaria y asegurar que sea respetada durante los conflictos armados.
El mandatario colombiano reiteró que las FARC son "criminales y mentirosas" y que ese grupo es el único responsable de la muerte de los 11 diputados, secuestrados en 2002 por la mayor guerrilla izquierdista del país, al descartar que hayan sido víctimas de supuesto "fuego cruzado" el 18 de junio como afirma la insurgencia.
Uribe dijo que se estudia una fórmula para indemnizar a los familiares de los 11 diputados, y que no dejará que a causa de este suceso vaya se acepte la exigencia de la guerrilla de despeje militar de una zona ya que sólo busca "beneficiarse".
En tanto, México emitió una "enérgica condena" por el "asesinato" de los diputados colombianos y expresó su respaldo a Bogotá para "la liberación de las víctimas del secuestro", en tanto que el papa Benedicto XVI condenó estas acciones y envió sus condolencias a los familiares de las "víctimas de tan injustificable violencia".